Líderes indígenas denuncian rearme de grupos armados en la Sierra Nevada

Santa Marta

Una nueva denuncia de varios líderes indígenas y campesinos de la Sierra Nevada prenden las alarmas sobre la presencia de supuestos actores armados ilegales.

Las comunidades indígenas afirman que desde hace más de seis meses están evidenciando la reaparición y el rearme de estos grupos guerrilleros, pero las autoridades las niegan, indicando que hay más de 400 soldados del Ejército Nacional custodiando el macizo montañoso y evitando su ingreso a esta zona del país.

Según el cabildo gobernador Kogui- Malayo- Arhuaco, José de los Santos Sauna, la situación es preocupante porque estos grupos ilegales pueden generar desplazamientos forzados de comunidades indígenas y hechos como los que hoy viven otras etnias en el departamento del Cauca.

“Estamos muy preocupados, temerosos porque en la Sierra Nevada estamos viendo a los grupos armados afectando los territorios. Finalmente nos tocará poner la vida y no queremos que suceda esto”, denuncia José de los Santos Sauna.

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El Cabildo Gobernador de los pueblos indígenas de la Sierra Nevada, señala que existe la alerta 045 de la Defensoría del Pueblo, que indica que sí hay presencia de hombres armados que quieren tomar el control en la zona para el tráfico de cocaína.

Se ha conocido, además, que varios de estos delincuentes, ofrecen seguridad a cambio de una cuota y pretenden controlar el contrabando que ingresa desde La Guajira hasta la capital del Magdalena.

PRESENCIA DEL CLAN DEL GOLFO

Luego del abatimiento de Jesús María Aguirre, alias Chucho Mercancía, máximo líder del Clan Los Pachencas, que tiene presencia en más de la mitad de la Sierra Nevada de Santa Marta y alrededores de La Guajira, se inició una guerra entre el grupo criminal Clan del Golfo, para obtener una posesión reina de la zona.

Los Pachencas se han convertido en autoridad de facto en esta zona del país, disputándose a sangre y fuego con el Clan del Golfo estos territorios y así tener el control de lucrativas rentas ilícitas.

“Necesitamos la tranquilidad y paz en la Sierra Nevada, estar en un pueblo unido, cuidar la naturaleza y la vida de nosotros. Estamos preocupados porque estas cosas son verdaderas, hemos visto los grupos en las zonas y estamos temerosos con lo que está pasando con los hermanos en el Cauca”, dice José de los Santos Sauna.

EL TRABAJO DEL EJÉRCITO NACIONAL

La Sierra Nevada de Santa Marta permanece vigilada de día y de noche por uniformados del Ejército Nacional.

Más de 400 soldados custodian los resguardos indígenas y les brindan acompañamiento para reforzar su seguridad y evitar que grupos ilegales tomen posesión sobre esas zonas.

Frente a la denuncia del pueblo indígena sobre el rearme de un nuevo grupo ilegal en la Sierra, la institución afirma que solo existe uno y es Los Pachencas, clan que ha sido desmantelado con las capturas de sus máximos cabecillas.

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“No tenemos conocimiento sobre la denuncia, porque todos los días tenemos la potestad de hablar con los cabildos indígenas, de indagar sobre todos los problemas que se presentan. Pero queremos decir que tenemos a lo largo y ancho de la Sierra Nevada, aproximadamente 400 soldados del Batallón de Alta Montaña, que protegen a los cabildos indígenas y personal civil”, asegura el coronel Javier Alexis León, comandante (e) y jefe del estado mayor de la Segunda Brigada del Ejército Nacional.

La fuerza pública del Magdalena trabaja de manera conjunta con la Fiscalía y autoridades policiales, para evitar el ingreso de otros actores armados que perturban la tranquilidad de estas poblaciones de la Sierra Nevada.