La Universidad de Cartagena ha aumentado el acceso a la educación superior

Alineada con el Plan El Plan Nacional de Ampliación de Cobertura, que busca aumentar el acceso a la educación superior, especialmente para poblaciones vulnerables, a través de políticas de gratuidad, infraestructura y estrategias de permanencia, la Universidad de Cartagena desarrolla su Plan Integral de Cobertura, una serie de acciones diseñadas para llevar su oferta educativa a zonas donde la educación superior ha sido históricamente limitada o inexistente.

Hace 3 años inició el reto de ampliar la cobertura con nueva oferta académica que fue diseñada a partir de las realidades y necesidades de los territorios, aplicando tres estrategias clave: la creación de programas nuevos, la ampliación de cupos en programas existentes y la ampliación de lugar de desarrollo de programas. Esta nueva apuesta abarca programas de diversas áreas del conocimiento como las ciencias sociales y humanas, educación, ciencias económicas, salud e ingeniería.

Adicionalmente, la Universidad de Cartagena ha implementado estrategias de retención y continuidad académica, como campañas de promoción focalizada y un robusto sistema de bienestar universitario. Este incluye subsidios de alimentación, apoyo psicosocial y caracterización de riesgo de deserción. Más del 70% de los estudiantes que han ingresado por ampliación de cobertura reciben apoyos de bienestar estudiantil. Es decir, la Universidad de Cartagena entiende la importancia de superar las brechas de acceso, pero también las de graduación.

La decisión de territorializar la oferta responde a dos principios fundamentales: pertinencia regional y equidad territorial. Hoy, la Universidad de Cartagena tiene presencia consolidada desde hace más de una década en múltiples municipios de Bolívar y Córdoba, como Magangué, Mompox, El Carmen de Bolívar, San Juan Nepomuceno, Cereté y Lorica. En estos territorios, se atiende a más de 8.000 estudiantes, en su mayoría provenientes de estratos 1 y 2, con alta proporción de población rural.

Las regiones donde se ubican estos municipios comparten condiciones estructurales de rezago: bajos índices de cobertura en educación superior, altos niveles de pobreza multidimensional, economías informales y limitado acceso a servicios públicos. Sin embargo, también son territorios con potencialidades productivas (como el turismo, la agroindustria y los servicios), que requieren talento humano calificado para su desarrollo sostenible.

La apertura de nuevos programas, tales como: Lenguas Extranjeras, Seguridad y Salud en el Trabajo, Licenciatura en Educación Infantil, Tecnología Agroindustrial, Ingeniería de Sistemas, y Técnico en Operación turística; en los centros tutoriales, ha beneficiado entre 2024 y 2025 a más de 900 estudiantes provenientes de departamentos como Bolívar, Sucre, Magdalena y Córdoba.

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La presencia de la Universidad de Cartagena en estos lugares no es asistencialista, sino estratégica: construyen tejido académico, institucional y comunitario, con una oferta pensada para transformar realidades locales y dinamizar las economías regionales. Además, han promovido más de una decena de alianzas con gobiernos locales, lo que ha permitido, por ejemplo, que algunas alcaldías asuman el costo de inscripción de los aspirantes más vulnerables.