Crece la tensión entre taxistas y la Policía de Tránsito en Cúcuta por falta de controles
El gremio acusa inoperancia y exige el traslado del comandante.
Policía de tránsito Cúcuta
Cúcuta.
La relación entre el gremio de taxistas de Cúcuta y la Seccional de Tránsito y Transporte atraviesa uno de sus momentos más críticos.
Los conductores formales aseguran que la ciudad se encuentra sin control vial, que el convenio de presencia policial no se está cumpliendo y que la ilegalidad —particularmente el transporte informal— crece a diario sin freno.
Juan Carlos Bastos, presidente del sindicato de taxistas, hizo pública su exigencia de que sea removido del cargo el capitán Paulo Palacios, actual comandante del cuerpo de tránsito. Según el vocero, no hay presencia policial en las calles, los operativos son escasos o nulos, y la movilidad está colapsada.
También denunció que los mototaxistas circulan sin control, incluso violando el decreto que prohíbe el parrillero hombre, y que los procedimientos sancionatorios se estarían aplicando de forma irregular.
“El convenio establece 34 uniformados para la ciudad. No pueden sacarlos a otra ciudad sin reemplazo. Mientras tanto, nosotros duramos hasta tres horas esperando un servicio en un paradero y los ilegales hacen lo que quieren. No hay autoridad”, afirmó Bastos, quien también entregó un oficio a la Dirección Nacional de Tránsito solicitando el traslado del oficial y adjuntando supuestas pruebas de incumplimientos.
En respuesta, el capitán Paulo Palacios defendió su labor y rechazó las acusaciones, calificándolas como producto de diferencias personales.
Aseguró que su equipo trabaja bajo el modelo internacional Visión Cero, enfocado en reducir los siniestros viales mediante controles, educación y campañas de prevención.
“Hacemos presencia en los sectores más críticos de la ciudad, como Prados del Este, la avenida Los Libertadores, Atalaya y barrios periféricos. Realizamos operativos contra el transporte ilegal, motociclistas infractores, piques clandestinos y vehículos de carga que incumplen las normas. Estamos cumpliendo con lo estipulado en el convenio”, explicó Palacios.
También destacó que la labor no se limita a imponer sanciones, sino que incluye acciones pedagógicas, articulación con la Secretaría de Tránsito y el compromiso institucional de garantizar la movilidad y seguridad de todos los actores viales.
“La ley es para todos. No puede usarse la presión gremial para deslegitimar una gestión que está en curso”, concluyó.