La poesía recorre el Caribe en una gira de homenaje a Raúl Gómez Jattin

“Poetas malditos o esclavos del verso”, un recorrido literario organizado por el Club de Lectura Las mil y una lectoras, en tributo al legado de Raúl Gómez Jattin y de todos aquellos poetas que escribieron desde la orilla del abismo.

Con éxito y gran acogida, se realizó esta gala en Santa Marta y Barranquilla, donde además se rindió homenaje al poeta Julio Flórez en su natalicio, y ahora finaliza en Cartagena, ciudad de origen de Gómez Jattin.

Mayo es el mes donde la palabra se vuelve grito, recordando la fecha de su nacimiento y fallecimiento e invoca la memoria de los malditos: aquellos escritores que vivieron entre la exaltación y la ruina, y que dejaron su alma impresa en cada verso.

Esta gira invita a lectores, artistas, bohemios, estudiantes y amantes de la poesía a leer o declamar poemas de Gómez Jattin o de otros autores considerados malditos.

La cita es en Cartagena, este viernes 30 de mayo a 6:30 p.m. en la Alianza Francesa de Cartagena, ubicada en el Centro Histórico, frente al parque Fernández de Madrid.

Entrada libre con inscripción previa en www.lasmilyunalectoras.com. Cupos limitados.

Raúl Gómez Jattin: el poeta que ardió en la palabra

Cartagenero, nacido en 1945 y cereteano de corazón, Raúl Gómez Jattin es una de las figuras más intensas y singulares de la poesía colombiana contemporánea. Su vida estuvo marcada por una sensibilidad aguda, el padecimiento de enfermedades mentales, y un destino errante que lo llevó a vivir en la calle durante varios años. Sin embargo, desde ese mismo margen escribió versos de una lucidez feroz sobre el amor, el deseo, la locura, la muerte y el silencio.

Poemas como “El dios que adora”, “Lola Jattin”, Casi obsceno" muestran el lirismo crudo y transparente que, aún hoy, conmueve a nuevas generaciones. Murió trágicamente en 1997, atropellado por un bus en Cartagena. Algunos lo llaman accidente. Otros, una despedida poética.

Jattin no fue solo un poeta. Fue un temblor. Y por eso, volver a él es abrir espacio a la poesía como verdad desnuda, sin adornos ni disfraces.

Las mil y una lectoras: un movimiento de lectura con alma de revolución poética

Nacido en Cartagena como un espacio íntimo de lectura entre mujeres, el Club Las mil y una lectoras se ha convertido en un faro cultural en el Caribe colombiano. Este colectivo ha logrado tejer comunidad a través de la palabra. Con eventos de fomento a la lectura, recorridos literarios, talleres, conversatorios y galas poéticas, han creado una red afectiva e intelectual donde la literatura no solo se lee, sino que se vive.

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Con una agenda itinerante y una apuesta decidida por las voces femeninas, afrodescendientes y caribeñas, Las mil y una lectoras no solo promueve libros: propicia memoria, crea interacción y activas conversaciones urgentes desde la poesía.