¿Cuál es la serpiente más peligrosa de Colombia? Habita en esta región del país

Durante años, las serpientes han sido animales curiosos y llamativos para los seres humanos, tanto por su belleza como por su extrañeza. Según explica el parque de animales SeaWorld en Estados Unidos, estas depredadoras habitan especialmente en las regiones tropicales y templadas del mundo y pueden encontrarse en todos los continentes, excepto en Antártica.

De las más de 3.000 especies que existen en el planeta, 270 de ellas se encuentran en Colombia y, aunque hay un gran prejuicio sobre ellas, en realidad solo el 5% de estas especies representan un riesgo para los colombianos, según explica el Instituto Nacional de Salud. Este porcentaje corresponde a las conocidas serpientes venenosas.

¿Por qué algunas serpientes son venenosas?

Un artículo de la Universidad Autónoma de México explica que las serpientes venenosas se diferencian del resto por tener particularmente un par de colmillos que son inoculadores de un veneno peligroso para el ser humano. Existen dos tipos de este veneno:

1. Veneno neurotóxico: según explica la institución, este es un neurobloqueador que trabaja sobre el sistema nervioso central e inhibe principalmente los impulsos respiratorios y cardiacos de sus presas.
2. Veneno proteolítico: este puede ser visto un poco más agresivo, puesto que tiene la función de destruir tejidos, ya sea piel, sangre, huesos, músculo o pelo.

Ahora bien, existe diferentes especies de serpientes venenosas en el país, pero, ¿cuál es la más peligrosa?

La serpiente más peligrosa que hay Colombia

Las serpientes cascabel muda, Lachesis muta o también conocidas como surucucú podrían ser consideradas las más peligrosas que se encuentran en el país, puesto que, como señala National Geographic, es la especie venenosa más grande de América del Sur.

De acuerdo con el Catálogo de anfibios y reptiles de Colombia realizado por la Universidad de Antioquia, este reptil en su etapa adulta puede tener un tamaño corporal entre 2 a 3.6 metros y se ubica principalmente en el sur del país, en los departamentos de Caquetá, Putumayo y Amazonas.

Adicionalmente, la revista científica señala que esta serpiente es considerada extremadamente venenosa. Sobre ello, explica que el centro de investigación biológica y biomédica brasileño, el Instituto Butantan, encontró que su veneno tiene una acción citotóxica (es decir, que mata células o tejidos), coagulante, hemorrágica y neurotóxica. Toda esta combinación provoca:

• Hinchazón
• Dolor local
• Necrosis
• Problemas de coagulación
• Hipotensión
• Diarrea
• Disminución del ritmo cardiaco. Esto puede llevar a que la persona entre en shock y, en casos más graves, lo puede conducir a la muerte.

A pesar de lo anterior, hay que señalar que los casos de mordeduras de esta serpiente en humanos no son muy frecuentes, esto se debe a que son animales que se esconden en bosques muy cerrados y tienen hábitos nocturnos, lo que hace más difícil su encuentro con humanos.

¿Cómo son estas serpientes?

De igual forma, el artículo del portal National Geographic señala que otras características particulares de este animal son:

• Son de color anaranjado con manchas oscuras a lo largo de su cuerpo. Su cabeza es triangular, tiene sus colmillos inoculadores de veneno y una fosa loreal, es decir, una fosa localizada entre la fosa nasal y los ojos.
• Suelen ser solitarias y nocturnas. Como cita el portal, el Instituto brasileño señala que estas serpientes son muy sigilosas y, cuando se sienten amenazadas, hacen vibrar su cola chocándola contra las hojas para producir un sonido particular e intentar de esta forma ahuyentar a sus depredadores.
• Es carnívora y se alimenta principalmente de mamíferos, roedores pequeños y medianos como ratas, ratones y coyotes, aunque ocasionalmente también se alimenta de aves y reptiles.