Qué no puede hacer un administrador de propiedad horizontal: Esto establece la norma

El término de propiedad horizontal es cuando un inmueble comparte su posesión y uso con varias personas. Según la Ley 675 del 2001, este tipo de pertenencias tiene un valor de derecho exclusivo a un bien específico y los espacios comunes no pueden ser embargados, vendidos, escriturados o con gravamen para su utilización.

Dentro de las edificaciones en las que puede entrar esta definición están los edificios, conjuntos y urbanizaciones. Incluso, la propiedad horizontal está presente no solo en usos residenciales, sino también en propiedades que son destinadas para actividad comercial y actividades mixtas.

De hecho, la jurisprudencia señala que solo hay tres motivos permitidos para terminar con este vínculo mercantil: una orden de un juzgado o autoridad, deterioro igual o mayor del 75% del edificio y la decisión de los titulares de la propiedad para acabarla.

Otras de las características de que tiene este manejo de los inmuebles es que son dirigidos por un administrador, el cual es el encargado de llevar la contabilidad, las actas de asambleas y hacer efectivas sanciones por incumplimiento de obligaciones previstas. Ahora, hay ciertas acciones que el encargado de la propiedad horizontal no puede hacer. Aquí le contamos.

¿Qué no puede hacer un administrador de propiedad horizontal?

Algunas de las acciones prohibidas son:

• Alquilar o ganar dinero del inmueble privado sin que el reglamento de la propiedad conjunta lo autorice.
• Realizar alguna modificación, reparación o remodelación que implique el daño estructural y evasión de las medidas de seguridad.
• Generar ruidos y molestias a los habitantes conjuntos.
• Realizar actos que atenten contra la salud pública.
• Elevar nuevos pisos o construcciones sin autorización de la asamblea general.

En el segundo punto, la ley hace especificaciones en cuanto a que no se pueden reformar las fachadas o partes de los edificios estructurales como el primer piso.

Otras acciones que también son graves e ilegales que practique un administrador es imponer multas (es función de la Junta Directiva), hacer públicos datos sensibles, tomar decisiones sin la autorización de la Junta, modificar reglamentos internos y negociar contratos sin notificación a la Asamblea.

A los administradores se le podrá aplicar una sanción y efectuar medidas judiciales de ser visto o comprobado de haber hecho alguna de estas acciones. De hecho, ante la ley, los administradores de propiedades horizontales tienen responsabilidades civiles y penales.

¿Quién supervisa a los administradores de propiedad horizontal?

La jurisprudencia establece que, después de la asamblea de propietarios y el Consejo de administración, le siguen los revisores fiscales y Comités de convivencia.

Principalmente, el revisor fiscal es quien puede hacer una labor de control frente a los administradores. Fuera de esta propiedad, no hay una entidad estatal que se encargue de esta vigilancia. Por eso, se debe remitir a juzgados civiles. Sin embargo, puede acceder a una cartilla especializada del Ministerio de Vivienda de Colombia para saber el proceder que estas figuras de poder tienen.

Por otro lado, el revisor fiscal hace recomendaciones e informes sobre cómo se debe optimizar los recursos y esfuerzos, ya sea por factores externos o internos, para lograr los bienes sociales. En ese sentido, puede hacerle sugerencias en el actuar de un administrador.