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Las contradicciones del presidente Petro en dos años de Gobierno

En Caracol Radio consultamos expertos e hicimos un recuento sobre el discurso del presidente Gustavo Petro en estos dos años de mandato

Gustavo Petro, presidente de Colombia. Foto: Getty Images. / Long Visual Press

Este 7 de agosto se cumplen dos años desde que Gustavo Petro asumió como jefe de Estado. El mandatario llegó a la Casa de Nariño con la promesa de ser “el Gobierno del Cambio”, asegurando que, con su gestión, cambiaría al país y consolidaría un mejor futuro para los colombianos.

En las elecciones, el presidente se quedó con 11.281.013 de votos, la cifra más alta alcanzada en la historia por un mandatario. Tras más de dos años del 20 de junio del 2022, fecha de las elecciones, en Caracol Radio realizamos un análisis sobre lo que ha sido la gestión de Petro.

En este artículo hacemos una revisión sobre las principales contradicciones de Gustavo Petro, relacionadas con los pilares de su gestión, la economía y temas que siguen levantando ampolla como la Constituyente.

La paz total: los avances y su política para la terminación del conflicto armado

Para el 14 de septiembre de 2022, Colombia fue testigo de la primera alocución presidencial de Gustavo Petro. En esa ocasión indicó que en su gobierno sería una prioridad los diálogos con actores armados para alcanzar la paz y se refirió a la ‘Paz Total’ como un eje central de su proyecto político.

Así las cosas, dijo que el plan Nacional de Desarrollo tendría como “norte y objetivo final la construcción de un entorno de paz total para toda la ciudadanía”, afirmación que reafirmó el 4 de noviembre de 2022, cuando sancionó la Ley de la Paz Total. Desde entonces, en repetidas ocasiones, el presidente ha pronunciado “paz total” como una de sus principales preocupaciones.

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Pese a esto, recientemente, el jefe de Estado señaló que él se ha referido a una política y que el término “paz total” se lo atribuyeron: “La política de paz, que han llamado paz total, no sé, a mí no me gustó el nombre, pero, bueno, ahora me lo echan encima”, aseguró. Una clara contradicción a su discurso inicial.

El profesor de la Universidad Nacional, y director del semillero Grupo de Investigación Presidencialismo y Participación, Miguel Herrera, explicó a Caracol Radio que el jefe de Estado, a pesar de promover la paz, no ha avanzado lo suficiente en la misma.

La bandera principal del gobierno Petro es la búsqueda de la paz total y en los dos años se ha enfrentado a lo que ningún gobierno ha podido en esa dirección. Una consideración genérica es que para el tiempo que ha recorrido no ha fluido este proceso, en la medida en la que el supuesto del gobierno tiene que señalar unas reglas claras y unos plazos concretos. Si eso no es así, se dan las situaciones que a la fecha tenemos”, indicó el profesor de la Nacional.

El experto mencionó, además, que el gobierno debe tener un rol más contundente frente a las negociaciones con los distintos grupos armados. “Un gobierno precisamente existe en la condición de gobernante, si esa condición no se hace explícita en sus actos y la flexibilidad se vuelve una justificación, entonces la paz sufre los contratiempos que a la vista tenemos.”

Adicionalmente, expresó que el presidente debe promover mayores esfuerzos en la implementación de los acuerdos de paz del 2016, que son una política de Estado. Al no ser así, esto deja a la vista una contradicción, ya que la promoción de la paz total supondría esfuerzos en los acuerdos firmados por Santos. “Esos acuerdos fijaron una agenda de seis puntos a cumplir. El presidente Petro al entrar en funciones pareciera haber ignorado en forma notoria que esos acuerdos tienen que cumplirse.”

El congelamiento e incremento de los peajes:

El tema sobre el costo de los peajes tomó partido durante el gobierno del presidente Gustavo Petro. En enero de 2023 manifestó que se iniciarían sanciones por medio de la Superintendencia sobre las concesiones que estipularan aumentos en las tarifas de los peajes, esto sin antes contar con un aval del Gobierno.

Exactamente el 15 de enero del 2023 el mandatario firmó un decreto en el que se estableció que todo peaje que estuviera bajo función del Invías y la Agencia Nacional de Infraestructura no contaría con aumentos, la iniciativa se dio porque en ese periodo de tiempo los ciudadanos entraron en discusiones, debido a que, se reportaron incrementos de tarifas en diferentes partes del país.

Si bien se dio a entender que dichos peajes estaban bajo la supervisión de privados y departamentales, esto dejó como resultado varias dudas y un año sin incrementos.

Usualmente, los precios de las tarifas de los peajes están a cargo del Gobierno y las concesiones que administran las carreteras, esto se establece anualmente, según los incrementos de la inflación del país.

Recordemos que para el 2023 el Gobierno estableció que se congelarían los precios de los peajes. El entonces ministro de Transporte, William Camargo, explicó que la medida tenía como objetivo mitigar el impacto en la canasta familiar. Además, en Caracol Radio comentó que los precios de los peajes “tienen que restablecerse porque en la práctica están consumiendo recursos del presupuesto nacional que pueden destinarse a otro tipo de necesidades del Estado”. No obstante, a lo largo del 2023 no sé incrementaron los valores de este servicio.

El ministro se pronunció nuevamente sobre el tema y detalló que el no haber incrementado las tarifas a lo largo del 2023 causó un déficit que llegó a los 800.000 millones de pesos. Por esto, para inicios de este 2024, el Gobierno aumentó las tarifas un 13,12%, por medio del decreto emitido el 20 de diciembre de 2023, este incremento se dio según el índice de precios al consumidor (IPC) de 2022.

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Sin embargo, este año se dio un incremento más, aproximadamente de 4,64% y a partir de agosto se modificaron los precios según el IPC de 2023.

Pero, además, se espera que en enero de 2025 se dé otro aumento, el cual suplirá la inflación que cause lo queda de 2024, lo que quiere decir que los colombianos obtendrán tres aumentos seguidos. Y pese a que se anunció que en 2023 no se darían los incrementos, en este 2024 ocurren dos.

Por otro lado, el mandatario durante su campaña de elecciones, según el gobernador de Bolívar, Yamil Arana, le habría prometido que el peaje de Turbaco dejaría de funcionar, a lo que para mayo de 2024, el gobernador realizaría un llamado para que se cumpliera su promesa.

El cobro del peaje inicio luego de que se venciera una prórroga de tres meses por la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) en febrero de 2024, cabe aclarar que el gobernador logró que se detuvieran los cobros hasta el 17 mayo por medio de la resolución 20243040005795.

Sin embargo, hasta día de hoy se sigue esperando que esto se cumpla, es decir, que desaparezca el peaje. Varios sectores se han pronunciado al respecto, tal es el caso de la diputada Sofía Ricardo, quien comentó en una ocasión que “el presidente Petro cuando estaba en campaña estuvo en Turbaco con ustedes, con la gorra puesta diciendo ‘no más peajes para Turbaco’”.

Reforma a la Constitución de 1991

Desde la ciudad de Cali el pasado 15 de marzo, el presidente Gustavo Petro anunció la posibilidad de desarrollar una constituyente. En ese momento, señaló que veía necesario revisar la Constitución. Al finalizar este pronunciamiento, el jefe de Estado recibió varias críticas. Pero enfatizó que la propuesta tenía relación con el bloqueo de las reformas en el Congreso.

En el pasado, antes de que Petro llegara a la Presidencia, había demostrado interés en modificar la Constitución. En 2018 indicó que había deudas sociales y que era necesario enmendarlas.

Tras las críticas por sus palabras en Cali el pasado 15 de marzo, la Presidencia señaló que este asunto se relacionaba realmente con la participación de los colombianos en las decisiones del país. “La Asamblea Constituyente propuesta por el presidente Petro pretende que la ciudadanía sea quien tome las riendas de las grandes decisiones que necesita el país y así avanzar en la solución de los problemas que históricamente ha enfrentado la sociedad colombiana.”

Petro incumplió también una promesa que realizó en 2018 cuando era candidato presidencial. Para ese año en la Plaza de Bolívar señaló que “no convocaré a una Asamblea Constituyente”, tema que ahora que es presidente pone sobre la mesa.

Recordemos que para modificar la Constitución se requiere una Asamblea Constituyente, la cual está integrada por representantes de la sociedad que tienen como meta velar por los intereses de los colombianos.

Posteriormente, el 18 de marzo el jefe de Estado señaló que hay seis asuntos que no se han cumplido con la Constitución de 1991. Así las cosas, Petro explicó que no se están priorizando algunos temas como lo son la educación, lo ambiental y una reforma agraria.

Adicionalmente, dijo que su objetivo en ese momento no era modificar la Constitución. “El proceso constituyente convocado no es ni para cambiar la constitución del 1991, ni para perpetuarme en el poder.” Esto último debido a especulaciones de que el mandatario pretende hacer una constituyente para aspirar a la reelección presidencial en 2026. “En las más de tres décadas que han pasado desde 1991, los poderes constituidos por el constituyente del 91, no han podido resolver varios problemas fundamentales que detienen a la sociedad colombiana y por eso debe el constituyente, es decir, el pueblo entrar a resolverlos”

Para finales de mayo, el mandatario habló de nuevo sobre sus intenciones e indicó desde Córdoba que los medios de comunicación y sectores políticos estarían malinterpretando sus palabras. El presidente comentó que el “poder constituyente” se estaba confundiendo con la consolidación de una asamblea constituyente para modificar la Constitución de 1991.

Estas fueron sus palabras: “No he hablado aquí de una Asamblea Constituyente, como repite una y otra vez la prensa, y menos aún que para reelegirme. Los que se reeligieron fueron otros, no yo, cambiaron la Constitución para ellos. Aquí yo estoy hablando de un poder constituyente, no confundan el objetivo con los medios”

Los meses han pasado, y los colombianos han escuchado también la necesidad de un Acuerdo Nacional. Aunque no hay mucha claridad, lo último que mencionado el Gobierno es que espera lograr un Acuerdo Nacional que derive en una Asamblea Nacional Constituyente. Todo esto ocurre justo con la llegada del nuevo ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, quien está liderando los diálogos regionales y con los gremios.

Petro, sus alianzas y las reformas:

El presidente Gustavo Petro logró la victoria junto a figuras políticas como Armando Benedetti, Cecilia López y Alejandro Gaviria. El mandatario conquistó el voto colombiano liderando la coalición del Pacto Histórico y convenció a no solo a miembros de la izquierda, sino del centro.

De acuerdo el profesor de la Universidad Nacional, y director del semillero Grupo de Investigación Presidencialismo y Participación, Miguel Herrera, el Pacto Histórico representaba la integración de varios grupos de corriente progresista, pero a medida que avanzó el Gobierno, las alianzas demostraron tener un camino difícil y poco a poco se fueron diluyendo.

Muestra de ellos fue la caída de la reforma a la salud. Petro le solicitó la renuncia protocolaria a todos sus ministros luego de que la Cámara levantara una sesión para su aprobación, pues no logró el quórum. “Hoy se construye un nuevo gabinete que ayudará a consolidar el programa de Gobierno, programa que será la base de un acuerdo nacional, franco y sincero, para seguir trabajando al servicio de las comunidades de todo el país”, dijo el presidente.

Poco después de la salida de Gaviria, la principal defensora de la reforma sanitaria, la ministra Carolina Corcho, tuvo que dejar su cargo. Petro le aceptó la renuncia. En estos dos años 40 ministros han dejado su cargo, demostrando lo que parece ser inestabilidad.

Al respecto, el profesor Herrera mencionó que el presidente para lograr el apoyo necesario en sus reformas debía tener en cuenta el poder legislativo. “El núcleo duro del Pacto Histórico, para poder realmente llevar adelante el programa de reformas sociales, lo que tenía que hacer era mirar de qué manera quedaba compuesto el poder legislativo”.

Sin embargo, recordemos que en Colombia las elecciones de Congreso se realizan meses antes a las presidenciales. Por esto, “tienen que establecerse alianzas para las elecciones presidenciales y de ahí surgieron las alianzas con el Pacto Histórico.”

Para el profesor, es claro que las alianzas que realizó el presidente no tuvieron en cuenta las reformas que plantearía en su gobierno. “Hay una contradicción en el modo en como fueron pensadas esas alianzas, en la medida que sus aliados se convirtieron en palos en la rueda de esos procesos”.

En Caracol Radio también consultamos al profesor de la Universidad del Rosario, Mauricio Jaramillo Jassir, experto en política exterior, quien explicó que en estos dos años el presidente ha realizado nombramientos que han empañado su mandato en términos del panorama internacional. Petro ha hecho “concesiones y nombramientos de personas, sobre todo, de cuotas políticas, las cuales, incluso, son de la derecha y que no son personas idóneas para estar allí.”

“No hablo de los casos de los jóvenes, porque creo que lo están haciendo bien. Como el caso del embajador Sebastián Guanumen en Chile o Álvaro Moisés Ninco Daza en México. Son buenos funcionarios y están renovando el servicio exterior. Yo me refiero más a algunas fichas de partidos políticos pensando en la gobernabilidad, pues eso ha empañado un poco. Y aunque uno pueda llegar a entender que el Gobierno tiene un margen estrecho, pues eso es una contradicción”, agregó el docente del Rosario

Mientras tanto, el también profesor de la Universidad del Rosario, Yann Basset, comentó en Caracol Radio que “desde que se rompió la coalición ha insistido que es una decisión correcta. Le ha valido muchas dificultades para pasar sus proyectos. La Reforma Pensional es la única que ha pasado con preguntas en cuanto a la constitucionalidad”.

Los retrasos en el ‘Gobierno del Cambio’

Desde un inicio el presidente Petro optó porque su primer gabinete representara la moderación y conciliación. El mismo día en el que asumió su cargo dio a conocer a sus funcionarios. Sin embargo, la transición entre la designación y la participación en el gobierno causó controversia.

Asimismo, aunque el jefe de Estado llegó a la Casa de Nariño con varios nombres para las diferentes entidades de gobierno, el día en el que asumió el rol no nombró a la totalidad de los funcionarios que lo acompañarían en su mandato.

Los días pasaron y se presentaron varios retrasos en los nombramientos, uno de ellos fue el del Ministerio de Minas y Energía, donde se nombró a Irene Vélez, cinco días después. A ella se le suma el Ministro de Comercio, Industria y Turismo, Germán Umaña; y Guillermo Reyes por el Ministerio de Transporte. Por otro lado, el retraso más grande sucedió en el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, donde luego de 10 días se nombró a Arturo Luna.

A su vez, el mandatario también presentó retrasos en los nombramientos administrativos, tal fue el caso de la dirección de Prosperidad Social, en la cual posicionó a Cielo Rusinque Urrego hasta la tarde del 12 de septiembre. Este cargo se vería modificado para el 2023, con Laura Sarabia, quien llegó 4 de septiembre y estuvo hasta febrero de 2024, lo que dejó que al siguiente mes se diera un tercer cambio. Exactamente, el 5 de marzo, Petro posicionó como nuevo director a Gustavo Bolívar, donde manifestó que se tenía que concentrar el esfuerzo y el subsidio a las personas que más lo necesitan.

Adicionalmente, durante el primer año de su mandato posesionó 29 ministros, por tanto, Petro realizó varios movimientos para agosto de 2023. Esto significa que de los 18 ministros originales, solo quedaron siete a su lado. Estos cambios se dieron drásticamente, debido a que se solicitaba que los que estuvieran en el mandato reforzarán las ideas de Petro ante los proyectos futuros, principalmente, con las reformas.

En el primer año, se realizó, por ejemplo, el cambio de la ministra de Agricultura, que comenzó el 7 de agosto 2022, y quien tiempo después fue reemplazada por Jhenifer Mojica. Esta última tan solo duro 15 meses, para que luego Martha Carvajalino fuera designada. Por otro lado, casos como el de Alejandro Gaviria, que fue pieza fundamental para las elecciones, causó dudas al no tener un cupo estable en el Gobierno.

No obstante, para el día de hoy se sabe que el presidente ha contado con 40 ministros y 54 viceministros.

Mauricio Jaramillo Jassir, profesor de la Universidad del Rosario, quien es experto en política Internacional, indica que, “un gobierno que llegó con la lógica del cambio y aunque se ha visto la lógica del cambio en la mayoría de cosas. Me parece que hubo sobre todo al principio muchos los retrasos en la designación de funcionarios, le quitó velocidad y vértigo, sobre todo los primeros meses”. Sobre esto, el docente mencionó también que los escándalos de corrupción con los que se han visto envueltos varios de los funcionarios de Petro le han quitado legitimidad a los propósitos de los planes del Gobierno.

Otro caso de inestabilidad comenzó el pasado 14 de junio, donde se comenzó a suponer que el presidente comenzaría una nueva jugada asignando nuevas personas en el Ministerio de Salud, Educación, Vivienda, entre otros. Luego Petro indicaría en su cuenta de X, antes Twitter, el 29 de junio el cambio de ministro del Interior con las siguientes palabras “El próximo ministro del Interior realizará los contactos necesarios para que se concrete el poder constituyente en este o en el próximo Gobierno. Gracias ministro Velasco por su buen trabajo”.

Según el analista, “sus contradicciones en los nombramientos y movimientos crean una brecha de incertidumbre, ya que el mismo Velasco fue una de las fichas claves para aprobar la reforma pensional, incluso, estuvo presente en otros temas relacionados con los proyectos presidenciales como la reforma laboral y la de salud”.

Para el profesor de la Universidad del Rosario los retrasos en los nombramientos y los cambios constantes serían una clara contradicción en el “Gobierno del Cambio”, ya que evidencia inestabilidad.

La contradicción que no es contradicción:

El presidente Gustavo Petro ha sido bastante cuestionado en las últimas dos semanas antes de cumplir sus dos años de Gobierno. Las críticas contra el mandatario tienen relación con su postura frente a las elecciones de Venezuela, luego de que el CNE diera la victoria de Nicolás Maduro.

El papel del presidente Petro y de su Gobierno ha sido visto con malos ojos al tardar tanto en referirse a las elecciones venezolanas, pero también sobre a quién ve como el triunfador en los comicios del país vecino.

Al respecto, el profesor de la Universidad Nacional, y director del semillero Grupo de Investigación Presidencialismo y Participación, Miguel Herrera, le comentó a Caracol Radio que la postura del presidente no sería una contradicción de su gobierno, pese a que se cree que sí lo es.

Si bien, la forma de actuar del presidente fue vista como un acto promovedor de la ‘izquierda’, Herrera, manifiesta que “tanto el gobierno colombiano, como el de México y de Brasil son progresistas y pro capitalistas”. Además, el docente mencionó que con el voto de los venezolanos esta sería una forma de actuar que deja como resultado un “ejercicio democrático”, por lo cual exigen independencia y autonomía para sus países.

Por otro lado, el profesor explica que “al proceder, de esta manera, tiene como resultado, la solicitud de respeto a lo constitucional, razón por la cual las elecciones tienen que solucionarlas el mismo país”.

Así las cosas, se ha llegado a entender que la postura del presidente Petro al no revelar quién ve como el nuevo presidente de Venezuela y ser flexible puede ser una contradicción. Para muchos es claro que las elecciones fueron un fraude.