Nuevo “bombardeo selectivo” israelí en Beirut
Por medio de un comunicado, el ejército israelí anunció que este ataque estaba dirigido al presunto responsable del ataque del lunes a la ciudad de Majdal Shams.
El ejército de Israel bombardeó la capital libanesa en símbolo de retaliación frente al ataque que mató a 12 niños en una cancha de fútbol en los altos del Golán, actualmente ocupados por Israel.
El ataque se hizo por medio de un avión no tripulado lanzó tres cohetes contra el edificio Al Rabiaa, “que era el objetivo del bombardeo hostil en los alrededores del Hospital Bahman”, confirmó la Agencia Nacional de Noticias libanesa (ANN).
De acuerdo con las fuerzas armadas israelíes, este bombardeo era además un “ataque dirigido” presuntamente a uno de los líderes del partido Hezbolá, que Israel responsabiliza del ataque en la ciudad de Majdal Shams que provocó la muerte de los 12 menores.
Luego de visitar la zona afectada por el ataque, el Primer Ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, anunció que " El Estado de Israel no dejará ni puede dejar pasar esto. Nuestra respuesta llegará y será dura”, y culpó de manera directa al grupo libanés, Hezbolá, a pesar de que estos negaron las declaraciones de ser los responsables por ese ataque particular.
Hasta el momento, se registran dos muertos tras el ataque israelí dirigido al comandante de Hezbolá.
Por su parte, el primer ministro de Israel compartió a través de su cuenta de X oficial que, “Acordamos una estrecha coordinación entre el gobierno y las fuerzas de seguridad, lo que conducirá a resultados efectivos y abordará de maera integral tanto los aspectos socioeconómicos como los de seguridad”.
A raíz de la actual guerra entre Israel y el grupo palestino, Hamás, tanto Hezbolá, como los hutíes han estado en constante conflicto. Pues la violencia entre estos se ha traducido a ataques con cohetes, bombardeos y disparos.
Como consecuencia de la creciente tensión entre Israel y Hezbolá, tanto Estado Unidos, como la Unión Europea han invitado a ambos lados a contenerse para evitar que esto desencadene en una guerra mayor con resultados inmensurables.