Estudiante de la Universidad de los Andes se quita la vida tras sufrir matoneo y abuso

Paipa

Johan Sebastián Castellanos Romero, de solo 20 años, decidió poner fin a su vida tras ser víctima de matoneo y abuso por parte de compañeros y profesores en la Universidad de los Andes en Bogotá. Según sus familiares, su situación económica y una queja contra una docente de Patología habrían contribuido al deterioro de su salud mental, llevándolo a tomar esta trágica decisión.

Originario de Paipa, Boyacá, Johan provenía de una familia humilde y logró ingresar a la Universidad de los Andes para estudiar Medicina gracias a su excelente rendimiento académico. En 2019, a los 16 años, se graduó como el mejor Icfes de Boyacá y el octavo en el país, lo que le permitió acceder a una beca del programa Generación E del Ministerio de Educación. Sin embargo, la beca no cubría todos sus gastos, y Johan se vio obligado a trabajar en un call center para poder mantenerse, lo que le llevó a aplazar varios semestres y sufrir burlas y acoso por parte de sus compañeros.

Oliva Romero, madre de Johan, le relató a SEMANA que su hijo fue objeto de persecución debido a su condición económica.

“Hubo persecución por su condición económica, porque él se puso a trabajar en un call center para comprar sus cosas y no sentirse tan menos. Pero él no era aceptado en la universidad”, afirmó.

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La situación empeoró cuando Johan fue señalado como el responsable de un correo anónimo que denunciaba a una profesora de Patología por permitir trampas en los exámenes. Esto incrementó el acoso y el maltrato hacia él, según su familia.

Oliva Romero cuestiona las medidas tomadas por la universidad, que a su juicio no fueron suficientes para evitar la trágica decisión de su hijo. “Él me decía que estaba presionado, que nadie lo quería, que lo rechazaban y que había un grupo de profesores, en especial esa profesora, que lo trataba mal, lo hacía sentir mal y le gritaba al frente de todos que con él era muy fácil acabar”, relató.

En mayo del 2023, Johan fue internado en la Clínica Montserrat debido a su deteriorada salud mental y recibió tratamiento para la depresión. A pesar de asistir a más de 15 sesiones con psiquiatría en la universidad, el acoso continuó. Finalmente, Johan decidió grabar un video, subirlo a redes sociales y acabar con su vida.