Erika Lasso le dijo adiós a los Juegos Olímpicos 2024, después de haber perdido su combate con la taiwanesa Chen-Hao Lin. En la madrugada de este sábado 27 de julio, la deportista colombiana no logró hacerle frente a su rival asiática, quien consiguió un Ippon (10 – 0) tras derribarla por 20 segundos.

Fue un encuentro parejo, que inició con suma cautela. Lasso mantuvo la calma e intentó derribar a su contrincante durante los primeros dos minutos, pero falló. A falta de tres minutos para terminar la pelea, Erika derribó a Chen-Hao Lin, pero la combatiente supo responder y no tuvo puntos en contra.

Ahora bien, a falta de un minuto, la representante de China Taipéi derribó e inmovilizó a la colombiana durante 20 segundos, lo cual le sirvió para puntuar un Ippon (puntuación máxima) y terminar el combate.

Declaraciones de Erika Lasso

Terminado el combate, Erika Lasso habló en Caracol Radio sobre lo vivido en su jornada de competencia y evaluó su presentación, haciendo énfasis en los errores que la llevaron a la derrota. “Gracias a todos por el apoyo. Aunque logré la clasificación en poco tiempo, siempre mantuve la expectativa muy alta. Venía haciendo un buen trabajo junto a mis entrenadores, tenía la confianza en ellos y en mi trabajo. Al final, en un solo combate se termina mi sueño, no logré mis expectativas, pero creo que Dios tiene un propósito para mí. Hasta aquí llegué y muchas gracias por el apoyo”, sentenció.

Comentó además que “el combate iba muy reñido, parejo”, pero falló al “descuidar la postura” y por tal razón “en unos segundos terminó todo”. “En esta altura de la competencia, acá solo llegan los mejores. Ningún combate iba a ser fácil, eso lo tenía claro. Toda la exigencia iba a estar dentro del combate con cualquier contrincante. Lo importante fue que di mi 110 por ciento y al final no se me dieron las cosas”, complementó.

Y concluyó: “Nosotros los deportistas estamos acostumbrados a tener un nivel de carga muy alto. Tuve mucha exigencia porque hice muchas competencias de seguido, tuve un desgaste emocional, pero logré recuperarme teniendo un tiempo de meditación para despejar la mente. Creo que llegué de la mejor manera física y mentalmente a los Juegos Olímpicos. Di todo al 110 por ciento, pero al final no se me dieron las cosas. Lo siento mucho”.