En Colombia persiste la violación a los derechos humanos: Departamento de Estado EE.UU.
El Departamento de Estado de EE.UU. reporta ejecuciones extrajudiciales, torturas y corrupción en su más reciente informe de Derechos Humanos en Colombia.
EE.UU.
El informe del Departamento de Estado inicia recalcando que “no hubo cambios significativos en la situación de los derechos humanos en Colombia durante 2023″, lo que resalta que la violación de los mismos sigue presente.
El reporte informa que los grupos armados no estatales, como los disidentes de las ex FARC y el ELN fueron importantes autores de abusos contra los derechos humanos y crímenes violentos, incluidos homicidios ilegítimos, secuestros, trata de personas, violencia sexual, reclutamiento y más, sin embargo resalta que “el gobierno generalmente investigaba y procesaba estas acciones cuando se denunciaban”.
El gobierno norteamericano expresa que se presentaron asesinatos extrajudiciales cometidos por el gobierno o sus agentes, durante el año, pero añade que “el gobierno tomó medidas creíbles para identificar y castigar a los funcionarios que pudieran haber cometido abusos contra los derechos humanos”.
Frente a la tortura y los tratos inhumanos, Estados Unidos asegura que, aunque la ley prohibía tales prácticas, hay informes creíbles que funcionarios gubernamentales las empleaban. resalta que la Fiscalía General informó que no acusaron formalmente a ningún policía o militar por presuntos actos de tortura, mientras que ONGs acumulaban casos y continuaban las denuncias de impunidad para los miembros de las fuerzas de seguridad.
El informe registra que hubo numerosos casos de corrupción dentro del gobierno durante el año, particularmente a nivel local y en relación con la implementación de los fondos del acuerdo de paz.
Menciona específicamente que se presentó corrupción dentro del sistema de justicia. También, las investigaciones de la Fiscalía contra el hijo y el hermano del presidente Petro, , Nicolás y Juan Fernando Petro, por presuntamente aceptar pagos irregulares, algunos de los cuales habrían financiado su campaña presidencial y resalta que los periodistas que informaron sobre corrupción se enfrentaron reiterativamente a amenazas.