Inspectores de Policía se oponen a asumir nuevas funciones de tránsito y transporte
Ser Agentes de transito es otra obligación se le suma a los inspectores de Policía.
oficial de transito
Tunja
En una reciente declaración, los inspectores de policía de diversas regiones del país expresaron su rotundo rechazo a la Ley 2197 del 22, la cual les asigna competencias adicionales en el control y vigilancia de tránsito y transportes, específicamente el rango de órdenes de comparendos por infracciones establecidas en la Ley 769 del 2002. Según sus voceros, esta medida los obligaría a desempeñar roles de policías de tránsito y transporte, lo cual consideran fuera de su ámbito de actuación.
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“Esta disposición del Ministerio de Transporte les impone una carga adicional de responsabilidades, especialmente en la emisión de comparendos en primera y segunda instancia. Además, señaló la precariedad de sus condiciones laborales, careciendo de los medios y elementos necesarios para cumplir con estas nuevas funciones”. Afirmo Daniel Ávila, presidente de los inspectores de policía del país.
En Boyacá, entre otras regiones, los inspectores de policía enfrentan una alta carga laboral sin contar con personal de apoyo, lo que agrava su situación. Ávila denunció que muchos de ellos trabajan prácticamente solos, sin acceso a equipos informáticos adecuados y con salarios que apenas alcanzan el mínimo.
En cuanto a las condiciones de trabajo, Ávila destacó que cumplen un horario normal de oficina, pero con una disponibilidad prácticamente las 24 horas del día, especialmente en situaciones de atención a accidentes de tránsito.
Ante esta situación, los inspectores de policía han iniciado acciones para solicitar una dignificación laboral, incluyendo un proyecto en la Cámara de Representantes que busca equilibrar estas condiciones. Sin embargo, hasta el momento, están a la espera del primer debate en la comisión primera de ley.
Respecto a posibles manifestaciones, Ávila informó que ya han realizado un plantón en Bogotá y planean congregarse nuevamente en la ciudad para seguir rechazando estas acciones que, según ellos, afectan su dignidad y la seguridad ciudadana.
En conclusión, los inspectores de policía del país hacen caso omiso a la Ley 2197 del 22, argumentando la falta de implementos, condiciones laborales precarias y salarios insuficientes para asumir estas nuevas responsabilidades en materia de tránsito y transporte.
