Radio en vivo

Actualidad

Suplementos: ¿Qué medidas tomar para evitar riesgos en la salud?

La producción de suplementos es tal que en 1994 había 4.000 productos en el mercado norteamericano y hoy en día ya se suman más de 95.000.

Suplementos - Getty Images / Strauss/Curtis

A medida que avanza la medicina, el desarrollo de fármacos y productos para la salud también lo hace. Asimismo, en un mundo cada vez más consciente sobre la importancia de cuidar la salud, las personas suelen optar por complementar su alimentación diaria con suplementos.

La producción de suplementos es tal que en 1994 había 4.000 productos en el mercado norteamericano y hoy en día ya se suman más de 95.000.

No obstante, en la actualidad hay distintos mitos sobre los suplementos. Hay quienes temen sobre la efectividad y otros aseguran que son “milagrosos”.

Los casos comunes en los que se consumen suplementos son en las situaciones en las que se busca tratar o prevenir la deficiencia de algún nutriente, cuando se está en embarazo, o cuando se es un adulto mayor.

De acuerdo a la Sociedad Americana del Cáncer, los suplementos son productos que se encuentran en distintas presentaciones y, además, su impacto en el cuerpo humano varía dependiendo de la composición. “El término ‘suplemento alimenticio’ se refiere a una gran gama de productos que incluyen vitaminas y minerales, hierbas y otros productos botánicos, aminoácidos y encimas, entre otros. Puede encontrar suplementos en muchas formas, como pastillas, gomas comestibles, polvos, líquidos, tés y barras.”

Adicionalmente, la misma entidad indicó que los suplementos son tratados como alimentos especiales y que esta sería la principal razón por la que este tipo de productos entran al mercado rápidamente.

¿Para qué son los suplementos alimenticios?

Los suplementos son beneficiosos para la salud, no obstante, es importante revisar que estos cumplan con todos los requisitos impuestos por las leyes sanitarias de cada país.

La Sociedad Americana del Cáncer ha explicado que los suplementos son un complemento de la alimentación diaria y que no tienen como objetivo prevenir enfermedades. “A diferencia de las medicinas, los suplementos alimenticios no están destinados para tratar, prevenir, diagnosticar o curar enfermedades”.

¿Cuáles son las diferencias entre los suplementos alimenticios y las medicinas?

Como se mencionó anteriormente, los suplementos no buscan tratar, prevenir, diagnosticar o curar enfermedades. Sin embargo, hay otras diferencias que hacen que estos productos sean tratados de manera distinta desde las ciencias de la salud.

La principal diferencia, además de las anteriores, se relaciona con la eficacia y seguridad de los suplementos. Las medicinas tienen que demostrar por medio de estudios su eficacia y seguridad, de lo contrario no pueden salir al mercado. En Estados Unidos los suplementos no necesitan cumplir con estos requisitos.

Así lo explica la Sociedad Americana del Cáncer: “Los suplementos alimenticios no se someten a los mismos requisitos rigurosos de pruebas que los medicamentos. En los Estados Unidos todos los medicamentos que usted puede comprar, incluso los que no requieren de receta médica, deben confirmar su eficacia y seguridad, lo cual no es requisito para los suplementos alimenticios.”

Por otra parte, los suplementos son tratados como alimentos especiales, mientras que las medicinas son reguladas por la Dirección de Alimentos y Medicamentos (FDA). Recordemos que la FDA es considerada como una importante entidad a nivel internacional en temas de regulación de medicinas.

Por otra parte, la FDA ha dejado presente que todo medicamento en estudios de laboratorio es considerado como inseguro hasta que no se compruebe su seguridad y efectividad. Por tanto, la desconfianza en los suplementos es mucho menor.

¿Qué medidas tomar para evitar riesgos en la salud?

Expertos han alertado al The New York Times que los suplementos se deben consumir con cuidado, pues pese a que contienen nutrientes no siempre son seguros. Hay que estar alerta cuando un suplemento tiene un nutriente en cantidades superiores a los alimentos.

Las dosis de los suplementos deben ser tenidas en cuenta, por tanto, se deben seguir las instrucciones de los empaques.

Comprar los suplementos en lugares seguros y de confianza. Las autoridades han encontrado que los fabricantes de los suplementos suelen mentir sobre lo que hay en el empaque (suplemento) y lo que dice la caja.

Es importante revisar las certificaciones de los suplementos, que sean otorgadas por entidades como la FDA o el Invima en Colombia.

Tomar los suplementos con asesoría médica. En ocasiones estos pueden detonar efectos negativos cuando se consume un medicamento.