Andrés Felipe Cadavid se reencontraría con José Fernando Salazar en Águilas Doradas
El experimentado zaguero central viene de poner fin a su etapa con el Independiente Medellín.
Andrés Felipe Cadavid se reencontraría con José Fernando Salazar en Águilas Doradas
Andrés Felipe Cadavid no es más jugador del Deportivo Independiente Medellín. A través de un comunicado publicado en redes sociales, el cuadro antioqueño anunció la salida del experimentado defensor, luego de llegar a un acuerdo con la directiva para la rescisión de su contrato.
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En diálogo con El Alargue de Caracol Radio, Cadavid manifestó haber salido de la mejor manera del Poderoso, aseguró que no hay problemas con la junta directiva de la institución y reveló las causas por las que se tomó la decisión conjunta.
Asimismo, el zaguero de 37 años indicó que tiene varias ofertas, no solo del país, incluída la segunda división, sino también del exterior. Justamente una de esas posibilidades es la de Águilas Doradas, aunque no deja de sorprender luego del altercado que tuvo el futbolista con José Fernando Salazar, máximo accionista del equipo.
Salida del Independiente Medellín
Alfredo Arias le bajó el pulgar: Ya había una decisión tomada. El profe cuando llegó ya habían dicho que yo salía de la institución hacia otro equipo, entonces ya había armado su proyecto. Yo ya sabía, de tiempo atrás, que esto iba a llegar. Igual, había que seguir entrenándose de la mejor manera.
Se va con el deber cumplido: Lo importante para mí es mi hija. Obviamente soy hincha de Medellín y estando aquí con ella (su hija), era un sueño que todo pudiera salir de la mejor manera. Igual cumplí un sueño de estar con Medellín, ganar dos Copas, se pudo llegar a más cosas importantes, pero de esta manera creo que está bien, salir de una buena manera de un club del cual uno fue hincha desde niño.
Amor de la hinchada: Estoy sorprendido por la cantidad de mensajes que tengo en este momento, de agradecimiento. Creo que mi mayor logro en el Medellín fue la del hincha discapacitado, que está en silla de ruedas, y entró al camerino y cuando le mostraron la camiseta número 5 la abrazó como si fuera un regalo del niño Dios. Eso siempre lo he dicho, para mí fue mi mejor regalo, es la copa que he ganado más importante en mi vida por lo que esta persona, en su discapacidad, entiende y se da cuenta de que mi trabajo es siempre con amor.
Buena relación con los directivos: Yo no me he caído con Don Raúl (Giraldo), es parcero mío. Daniel (Ossa) también, el presidente. Es un gran amigo. Ellos son excelentes personas. Son cosas que uno tiene que saber manejar. Es un equipo de fútbol, una empresa donde se toman decisiones y es normal. Contento y feliz por como se dio mi salida de la mejor manera. Deja uno amigos. Entender que de una u otra manera las cosas pueden ser mejor así.
Futuro próximo: ¿el FPC o el exterior?
Su historia en el fútbol no acaba: Todavía tengo mucho que darle al fútbol y ya Dios escogerá mi camino para que, si es seguir jugando al fútbol, como muchos equipos me han hecho saber que tienen el interés de contar conmigo, así lo haremos de la mejor manera, con mucho amor y haciendo las cosas bien.
Su destino no pasa por el dinero: Esperemos en 2, 3 días poder definir. Lo económico es importante, pero realmente quiero llegar a un club donde me amen y quieran que yo me les tire de cabeza por ellos.
Posibilidades: Hay varios equipos importantes. Hay dos importantes de Colombia. Hay varios que también tiene proyectos interesantes. También hay un equipo de la B que está dando el todo por el todo para que llegue ahí y poder jugar con ellos. Hay dos del exterior que prácticamente están preguntando por mí, pero estoy tranquilo. Lo más importante es tomar la decisión pensando en mi hija, en hacer las cosas bien, en estar en el lugar donde me quieran y sientan que puedo aportar, que sientan que con mi trabajo de amor puedo darle mucho al equipo donde vaya a estar porque es lo más importante. Cuando llegué a Medellín sentí eso.
Águilas Doradas y José Fernando Salazar: Somos personas guerreras, frenteras, que en la cancha nos decimos muchas cosas. Cuando él (Salazar) se hacía ahí en el banco, era una guerra, pero uno sabe que esto es fútbol. Y lo bueno del fútbol es que uno pega patadas, puños, pero apenas se termina el partido se va y se da un abrazo. Eso es lo más importante, las peleas se quedan allí. Todo está bien, llegue o no, se sabe que esto es fútbol.