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Ataque de un tiburón a un apneista en San Andrés

El ataque fue de un tiburón puntas blancas oceánico de dos metros de largo, y fue prácticamente en la superficie del mar

Historia del ataque de un tiburón a un apneista en San Andrés

El apneista Cristian Castaño, integrante de la Selección Colombia de este deporte, relató en diálogo con Planeta Caracol el percance se sufrió cuando entrenaba con varios compañeros en aguas de San Andrés, en el sector de Nirvana, cuando fue mordido por un tiburón de puntas blancas.

“Estoy en recuperación pero no estoy afectado de gravedad. Recibí una heridas profundas unos cortes profundos”, manifestó Cristina y agregó que “todo comenzó cuando se desplazaron 500 metros de la playa para realizar unas inmersiones dentro del proceso de preparación para el Mundial de Apnea previsto en Honduras durante el mes de agosto”.

Cristian Castaño relató que “el ataque fue de un tiburón puntas blancas oceánico de dos metros de largo, prácticamente en la superficie del mar. Vi que el tiburón estaba agresivo. Siento que lo que él tenía era hambre. En el primer acercamiento lo golpeo con mis aletas. Decidimos nadar hacia la orilla y el tiburón insistía en acercarse y me muerde y comencé a ver sangre en el agua”.

El apneita de la Selección Colombia de esta disciplina agregó que “el después que lo muerde comenzó una batalla en el agua con el tiburón, al cual que linchaba los ojos con sus dedos para tratarlo de alejar, fueron más de diez minutos de lucha en el agua. Y en ese momento una compañera ve una lancha de Coralina y lo rescata con heridas en los dos brazos y una pierna”.

Cristian dijo en Planeta Caracol, “estoy vivo de milagro hermano, de verdad”. Y analizó que no es habitual que este tiburón oceánico de puntas blancas esté cerca de las playas porque es una especie de aguas profundas. Pero tal vez, la creciente pesca extensiva está arrasando con los peces que se alimenta y terminan buscando alimento en aguas poco profundas”.

Esa sobre pesca altera los ecosistemas marinos, pero también se suma la disposición de residuos por parte de los isleños en el mar. Cristian Castaño afirmó categóricamente que “a pesar del ataque no tiene ningún resentimiento con el tiburón, porque el mar es su hábitat, y tampoco considera que el tiburón deba ser sacrificado”.

Es importante recordarle a la comunidad que los tiburones están en su hábitat natural y es el hombre que ingresa en sus dominios, por tanto hay que tener mayor respeto con la naturaleza y tomar las precauciones ante este tipo de encuentros. Los Tiburones están protegidos y quien sea sorprendido tratando de agredirlos podrán ser objeto de sanciones ambientales y judiciales.