Lucha contra la corrupción en Colombia está estancada desde 2020
El índice Global de Corrupción pide al gobierno colombiano aumentar la transparencia en el sistema político, contratación pública y garantizar la independencia judicial.
Mapa del índice Global de Corrupción para el 2022. La escala establece marrón como muy corrupto y amarillo como muy transparente. (Foto: cortesía Transparencia Internacional)
Transparencia Internacional (TI) lanzó su Índice Global de Corrupción de 2022 en el que advierte que la corrupción en Colombia comenzó a subir en 2018 y su control se estancó desde 2020. El informe destaca que Colombia obtuvo una calificación de 39 (siendo 0 muy corrupto y 100 muy transparente).
En su reporte se destaca que, el triunfo electoral de Gustavo Petro en 2022 mejoró la expectativa de cambio en Colombia, pero esto no ha mejorado su calificación de 39 en el Índice dado que esta calificación se mantiene desde 2021. TI destaca que buena parte del puntaje viene enmarcado en las protestas masivas registradas entre 2019 y 2021.
Otros aspectos que se suman y explican el resultado de la calificación de Colombia en el Índice son “los flujos financieros ilícitos derivados de la corrupción y el crimen organizado, como la deforestación ilegal” que se clasifican como “barreras para el logro de la agenda social, económica y ambiental del país”.
Con este panorama, TI dice que Colombia “necesita mayor transparencia en su sistema político, mayor control sobre los mecanismos discrecionales de contratación pública, más independencia en los organismos de control y el sistema judicial, y protección para los denunciantes”.
Así es el panorama de corrupción a nivel global:
A su vez se pide al gobierno Petro mantener “una efectiva separación de poderes y garantizar condiciones para que la sociedad civil, los medios de comunicación y otros actores no estatales ejerzan el control del poder, especialmente a nivel local en el contexto de los acuerdos de paz de 2016″.
Transparencia Internacional concluye que “las elecciones locales a realizarse en octubre de 2023 pondrán a prueba una vez más la transparencia y eficiencia del sistema electoral, así como la capacidad del país para abrir espacios a nuevos actores políticos”.
