Habitantes de calle amenazan con sustancias químicas a residentes de Chapinero Norte
Los ciudadanos denuncian que carreteros y habitantes de calle han invadido el espacio público
Bogotá
Residentes del barrio Chapinero Norte, denuncia que en los últimos 6 meses la situación de inseguridad en el sector se ha incrementado por cuenta de carreteros y habitantes de calle que se han instalado en inmediaciones del muro de los Jesuitas del Seminario, invadiendo, exactamente, la carrera 9.ª entre calles 65 y 66.
Lo problemático de la situación, no es solo la invasión al espacio público, sino, los malos olores, la percepción de inseguridad, el ruido que generan y como si fuera poco, las amenazas de las que han tenido que ser víctimas los residentes del sector.
Caracol Radio, hablo con una residente del barrio Chapinero Norte, quien expresó su preocupación.
“Estamos abocados a que hagan lo que quieran, no los podemos mirar, una persona se atrevió a acercarse a decirles que, por favor, por qué no se hacían en otro lado, y le dijeron que si seguían jodiendo le iban a echar ácido en la cara”, indico.
La ciudadana, también aseguro que han acudido a las autoridades, pero no han recibido ayuda.
“Somos gente organizada y respetuosa de las normas, vamos a través de los canales oficiales para que nos atienda y no nos han atendido. Lo que más sorprende es que la Secretaría de Integración Social dice que ellos tienen derechos humanos y si eligen una cuadra pueden vivir ahí, a pesar de que ocupan el espacio público, de que la gente ya no puede utilizar el andén y de que tiene un perro agresivo”, dijo la ciudadana.
Ante este panorama, la comunidad del barrio Chapinero Norte, se ha organizado, para entre todos, exigir a la Alcaldía Local y demás entidades competentes, una pronta solución, a la incómoda situación que han tenido que vivir por varios meses.
“Ya somos varios vecinos, hemos recogido 75 firmas y las mandamos a la Alcaldía mayor para que nos atiendan y nos limpien esa calle, el olor es horrible, ese es el baño público de ellos, se drogan, ponen un bafle a todo volumen y no dejan dormir a la vecindad”, puntualizó la residente.