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¿Por qué se han demorado las obras de la Cordialidad en Barranquilla?

Una obra que costó inicialmente más de $90.000 millones ahora cuesta más de $151.000 millones. Tiene ocho prórrogas, debía ser entregada en 2019 y aún está en ejecución.

La ampliación de la Avenida Cordialidad tenía que ser entregada en diciembre del 2019 por lo que se contrató por un valor superior a los $90.000 millones, pero a pesar de cuatro años, ocho prórrogas, y dos millonarias adiciones, la obra tiene una ejecución del 62.7%, según un documento de la Agencia Distrital de Infraestructura, entidad que suscribió el contrato.

Caracol Radio consultó a Alberto Salah, Gerente de la Agencia Distrital de Infraestructura, entidad que suscribió este contrato sobre las prórrogas y adiciones que ha tenido este contrato e indicó que fueron necesarias por la pandemia del COVID-19 y también por obras no contempladas.

“Pero la razón primordial de todas estas prorrogas y dificultades, es que nosotros durante los años 2020 y 2021 tuvimos una época muy complejo, un periodo de pandemia y tuvimos un inconveniente claro: los predios eran necesarios pagarlos para poder adquirir, los predios no dan espera en el sentido de la caja.... Se hicieron obras de protección, se hicieron obras hidráulicas y como te digo vinieron a solventar problemas que estaban sucediendo aguas abajo. Las obras de protección que se hicieron fueron muros que de una y otra manera daban soporte, daban cimiento a la vía y de alguna manera al terreno inestable que estaba en ese sector”, dijo Salah a Caracol Radio.

Obras en la Avenida Circunvalar

El funcionario, en la entrevista afirmó que para esta obra no habrá más adición presupuestal y se espera que sea entregado antes del primer semestre del otro año.

“Fuera de lo que hoy se ha especificado como una adición ya no hay un recurso extra o adicional para el desarrollo de la obra y bueno, esperando finalizar a mas tardar abril o mayo, ya teniendo la Cordialidad que nos hemos propuesto hacer”, dijo.

Según el documento de la ADI, esta obra tiene una ejecución del 63.7%, la prorroga octava dice que la finalización de las obras es el 30 de diciembre del otro año, antes que se acabe este mes habrá un desalojo de las viviendas ubicadas en la Cordialidad entre 8G Y 8E.

Caracol Radio visitó la zona y se puede ver lo siguiente: Desde el Sao de la Macarena está en obra hasta casi llegar a la carrera 11, por el carril derecho. Los carros deben tomar desvío para seguir más adelante la cordialidad; desde la Carrera 20 hasta la 21, se inició a trabajar por carril izquierdo; desde la Carrera 21 hasta la 22, hay trabajo por la mitad y hay maquinaria y la carrera 23 (dónde se termina el trabajo) solo se ha hecho nuevo el carril derecho.

Los ocupantes de al menos cuatro viviendas serán desalojados antes de finalizar este mes.

VEEDORES CUESTIONAN

Veedores denuncian que a pesar que esta obra tenía que ser entregada en diciembre del 2019, tras un plazo de ejecución de 20 meses, aún le restan más del 30% de ejecución. Y además ha tenido ocho prorrogas y dos adiciones costando actualmente esta obra más de 151.000 millones de pesos, cuando se había firmado por más de 95.000 millones de pesos.

Veedores también denuncian que en la Unión Temporal Gran Vía R90 que se constituyó participó Valorcón S.A., cuestionada por obras del Aeropuerto Ernesto Cortissoz y que después de seis meses de iniciar la obra cedió sus derechos económicos a la otra empresa que hace parte del Consorcio: Inversiones JACUR &CIA LTDA, cuyo propietario es Faisal Cure, mencionado por la excongresista condenada y prófuga Aida Merlano sobre supuesta compra de votos y además sobre esta empresa el INVIMA ordenó retirar unas pruebas rápidas de COVID-19 por su pobre desempeño.

“También nos llama la atención las modalidad bajo la cual se suscribe y cambios que debe ser un llamado a las autoridades para que entren a detallar y es que este contrato se licitó bajo la figura de crédito proveedor que es una figura que prácticamente permite que privados le presten al Estado y le cobren intereses a una tasa que estipulan ambos. Esta es una figura que limita un poco la participación a los consorcios o megacontratistas que tiene un gran músculo financiero, pero cuando vemos bien el desarrollo del contrato la modalidad cambia en menos de doce meses y pasa de ser un contrato de crédito proveedor a un contrato de obra pública”, dijo Reynaldo Torres, veedor.