El fútbol volverá sin protestas a los árbitros
José Borda le cuenta qué comportamientos disciplinarios y de los jugadores deberán cambiar una vez vuelvan los partidos.
Por: José Borda
El fútbol retornará, de eso no hay duda, claro, se demorará un poco pero volverá, sin una fecha fija aún, los balones rodarán y los pitos sonarán de nuevo en los estadios de todo el mundo; no obstante, el deporte rey sufrirá algunos cambios, incluyendo su forma de juzgarlo.
Dentro de las variaciones que tendrá y a las que no estamos habituados encontraremos inicialmente las tribunas vacías, esto es inapelable, el público que alentaba a los jugadores y recriminaba a los árbitros ya no estará. Difícil para los jugadores aunque más fácil para los árbitros quienes no recibirán esa presión adicional desde las tribunas.
De igual forma nos acostumbraremos a ver a jueces y jugadores pasando por túneles de aspersión antes de entrar al campo y saliendo de este. Recogebolas alrededor del terreno de juego con tapabocas, guantes y geles desinfectantes para limpiar los balones; ya no podrán salir a los actos protocolarios niños cogidos de las manos de los futbolistas ni habrá choque de manos entre árbitros y jugadores; por su parte, los sorteos se harán guardando la distancia de seguridad entre unos y otros.
- Árbitros pequeños, los que más tarjetas muestran en el fútbol
- Hermanos de sangre y de arbitraje en Colombia
Dentro del terreno de juego veremos que los jugadores ya no encararán airadamente a los árbitros para protestar las decisiones, gritándolos ni hablándoles muy de cerca. Mucho menos a los compañeros o con los rivales tirándoselas de bravucones, pues se deberá guardar la distancia de seguridad estipulada en estos casos.
También tendrá que desaparecer esa fea costumbre donde futbolistas y silbatos escupían o lanzaban otros fluidos al césped; tampoco podrán compartir bebidas hidratantes y cuando haya goles, ya no habrán coreografías ni celebraciones piramidales en las que todos se abrazaban. Los tests para encontrar el COVID-19 se convertirán en el pan de cada día a fin de asegurar la salud de la competición
En el juego poco cambiará, los jugadores marcarán a sus rivales, cometerán faltas, penaltis, fueras de juego, se darán patadas, pelearán balones divididos, se pondrán en la barreras y los amonestarán y expulsarán.
Ocurrirán cambios puntuales, por ejemplo dejarán la “cogedera” dentro de las áreas y tendrán que seleccionar previamente los jugadores que cobrarán los penaltis y tiros libres para que no haya agarrones y tumultos por quien lo hace, esto porque tendrán que aplicar a rajatabla los protocolos establecidos. Los árbitros no tendrán ningún tipo de contacto con los jugadores como darle la mano para levantarlos, utilizaran spray desinfectantes para rociar el balón y marcar la distancia de los jugadores.
De llegar a utilizarse el VAR, en las cabinas los jueces estarán con tapabocas y separados por páneles. Lo que está claro es que todos quienes estamos alrededor del deporte, otrora llamado "de las grandes multitudes”, nos tendremos que adaptar al fútbol que viene, y todo gracias al COVID-19.