El empresario colombiano <strong>Alex Saab,</strong> fue sancionado hoy (incluido en la llamada Lista Clinton) por la justicia de <strong>Estados Unidos</strong> por haber realizado negocios ilícitos con los hijastros de <a title="Nicolás Maduro" href="https://caracol.com.co/tag/nicolas_maduro/a/" target="_blank">Nicolás Maduro</a> a través del sistema alimenticio de Venezuela. Además, el Departamento de Justicia de Estados Unidos informó que le abrió una investigación por lavado de activos, por movimientos de dinero a través de<strong> Hong Kong</strong>, Turquía,<strong> México</strong> y la misma<a title="Venezuela" href="https://caracol.com.co/tag/venezuela/a/" target="_blank"><strong> Venezuela.</strong></a>La relación comercial con los hijastros de <strong>Maduro</strong> no logró suplir las necesidades de los ciudadanos venezolanos, ya que no llegaban las raciones suficientes para mantener una a<strong>limentación básica.</strong> Muchos de ellos solo comen una o máximo dos veces al día.Alex Saab junto con sus<strong> socios</strong> crearon un <strong>modus operandi</strong> a nivel internacional, con el objetivo de beneficiarse económicamente de los contratos que realizaban con el <strong>régimen de Maduro.</strong>En el<strong> 2009,</strong> Alex Saab y su socio, <strong>Álvaro Enrique Pulido Vargas</strong> (quien recibió la misma sanción y también es investigado), crearon una empresa con el fin de obtener contratos en el país bolivariano. Lo hacían a través de sobornos a funcionarios del gobierno. Después de un año, los empresarios colombianos consiguieron un <strong>gran contrato</strong> para construi<strong>r 25.000 casas</strong> a cambio de recibir aproximadamente cuatro veces el valor de la <strong>construcción.</strong>Dos años después, Saab le brindó contratos a la esposa de Maduro<strong>, Cilia Adela Flores;</strong> a sus tres hijos Walter, <strong>Yosser y Yoswal</strong>, y a su sobrino Carlos Malpica, para la limpieza de terrenos que permitieran la construcción de casas en el Estado de <strong>Táchira</strong>. Con esto, Saab se abrió un camino directo hacia los altos funcionarios del gobierno, puesto que los hijos de Maduro tenían contacto directo con <strong>Tareck Zaidan</strong> El Aissami, actual ministro de Industrias y Producción Nacional y ex vicepresidente. Por tal razón, podían <strong>manipular los contratos.</strong>Saab logró involucrarse en el programa gubernamental llamado <strong>Comités Locales de Abastecimiento y Producción</strong> (CLAP) el cual se encarga de subsidiar cajas con raciones de comida para suplir las necesidades que pasaba la población en <a title="Venezuela" href="https://caracol.com.co/tag/venezuela/a/" target="_blank">Venezuela.</a> Él, junto con su socio <strong>Pulido</strong>, crearon una estructura corporativa para comprar la comida y los empaques a distribuidores <strong>extranjeros.</strong>A través de la empresa <strong>Group Grand Limited,</strong> con sede en Hong Kong y México (la cual dirige el hijo de Pulido, Emmanuel Enrique, en este último) lograron obtener millones de dólares en beneficios de este <strong>negocio.</strong>José Gregorio Vilma Mora, gobernador del<strong> Estado de Táchira</strong>, y Marco Torres, quién fue ministro de <strong>Alimentación,</strong> ayudaron a Saab a para importar solo una pequeña parte de la comida a territorio venezolano a cambio de millonarios sobornos, todo bajo la lupa de<a title="Nicolás Maduro" href="https://caracol.com.co/tag/nicolas_maduro/a/" target="_blank"> Nicolás Maduro.</a><em><strong>Lea También: <a title="Alex Saab entra a lista Clinton por sus nexos con el régimen de Maduro" href="http://caracol.com.co/radio/2019/07/25/internacional/1564080015_507773.html" target="_blank">Alex Saab entra a lista Clinton por sus nexos con el régimen de Maduro</a></strong></em>Gracias a los contactos, los <strong>empresarios colombianos</strong> lograron conseguir un gran número de contratos sin licitación por parte de políticos venezolanos de alta jerarquía que tenían una gran influencia en las empresas <strong>más grandes</strong> del país. El gobierno de Venezuela, daba dinero a estas empresas para que se encargaran de distribuir los sobornos y las <strong>coimas</strong> a los funcionarios necesarios en todo el territorio.El CLAP contrataba compañías que no tenían que ver con el sector <strong>alimenticio</strong> las cuales sub contrataban a otras<strong> compañías,</strong> todas estas pertenecientes a políticos corruptos venezolanos. De esta manera, podían ocultar el origen del dinero, <strong>consignándolo</strong> en diferentes cuentas que no se relacionaban directamente con la distribución o logística de la comida.En el año<strong> 2018</strong>, las divisas de cambio para Venezuela se volvieron cada vez más graves, por lo que el gobierno de<strong> Maduro</strong> tuvo que recurrir al oro para pagar contratos en los que se incluían los del <strong>CLAP.</strong>A causa de esto, Saab empezó a trabajar directamente con el ministro de<strong> Industria</strong>, El Aissami, para crear una estructura con el objetivo de vender oro a Turquía. Debido a estas operaciones, el secretario del Tesoro de Estados Unidos,<strong> Steven Mnuchin</strong> impuso fuertes sanciones para frenar estas actividades a finales del año<strong> 2018.</strong>El Banco de Desarrollo Económico y Social de Venezuela <strong>(BANDES)</strong>, firmó un contrato con<strong> Alex Saab</strong> que le permitió al empresario obtener moneda venezolana para que pudiera comprar oro a los mineros locales. Así, los mineros le vendían al precio oficial del mercado en vez del precio del<strong> mercado negro</strong>, todo por presiones del gobierno.De esta manera, el oro era refinado en Caracas, luego vendido al<strong> Banco Central de Venezuela</strong> (BVC) y desde ahí se exportaba para Emiratos Árabes Unidos y Turquía. El gobierno turco depositaba el pago a Venezuela en cuentas que el<strong> BVC</strong> tenía en país euroasiático.Entre entramado de corrupción contó con múltiples funcionarios de <strong>alta jerarquía d</strong>el gobierno venezolano y con la participación de empresas que operaban a nivel internacional, todas guiadas por las actuaciones de <strong>Alex Saab</strong> y<strong> Nicolás Maduro.</strong>