La red integrada por nueve personas contaba con la asesoría científica de un ciudadano egipcio y profesor universitario en la ciudad de Cali.Se trata de Frass Yousef Mahmud, un farmacólogo con amplia experiencia que le decía a la red como adulterar los medicamentos para incluirlos en el <strong>contrabando que actualmente le deja millonarios recursos a las organizaciones criminales dedicadas a este tráfico</strong>.La mayoría de capturados se encargaban de conseguir los medicamentos en hospitales y hasta en asilos, a través de funcionarios que los vendían incluso vencidos. En algunos casos establecieron que aun cuando adultos mayores fallecían no lo reportaban para recibir los medicamentos.Luego de tener los medicamentos los alteraban, borraban los sellos o fechas de vencimiento y los vendían a otros delincuentes que los introducían en el marcado negro o <strong>incluso los utilizaban en la elaboración de escopolamina para cometer otros atracos. </strong>La Fiscalía identificó más de 125 medicamentos de uso controlado que fueron modificados y vendidos por la organización ilícita.Los más adulterados, según el ente acusador, son: tratamientos para la diabetes, la disfunción eréctil, la epilepsia, el insomnio, la esquizofrenia, la hipertensión, enfermedades pediátricas y patologías que afectan el sistema nervioso e inmunológico.Muchos de <strong>esos medicamente vencidos llegaban al a través del contrabando y provenientes de Venezuela y Ecuador</strong>, lo que obligaba a ser más específicos en la adulteración de registros sanitarios.A pesar del trabajo de investigación de la Fiscalía y de que nueve capturados aceptaron su responsabilidad en el tráfico de medicamentos, un juez los benefició con detención domiciliaria, solo a alias el Faraón lo mandaron para la cárcel, porque no aceptó cargos.