El equilibrio que debe buscar Iván Duque según The Economist

Colombia

Con mucho viento y lluvia comenzó el gobierno de Iván Duque, así se refiere la publicación británica a la posesión del presidente colombiano. Dice que es una muestra de lo que ocurrió el pasado 7 de agosto cuando el mandatario prometió un pacto nacional para construir en medio de la polarización, mientras el presidente del Congreso, Ernesto Macías, atacó al dirigente anterior.

The Economist afirma que a ese dilema entre las posiciones del Centro Democrático, liderado por Álvaro Uribe y buscar consenso con otros movimientos para conseguir apoyo legislativo se enfrenta Duque en los próximos meses.

Menciona la situación actual del ex presidente y senador, que había renunciado a su curul en medio de una investigación que adelanta la Corte Suprema por el soborno y fraude procesal, y que luego decidió retirar esa renuncia. Por lo que dice que mientras no se resuelva su caso, las relaciones de Duque con el partido serán inestables.

La publicación asegura que prometió suavizar un poco la línea ‘uribista’, pero tendrá retos complicados en cuanto a la implementación de la paz, los diálogos con el ELN y la erradicación de los cultivos de coca. Ahí verá nuevamente enfrentadas las posiciones del Centro Democrático con otras, y además en el aspecto del narcotráfico también tiene que analizar la opinión de Estados Unidos.

Sobre los cultivos ilícitos afirma que aumentará la erradicación forzada a través de drones, lo que podría generar conflicto con campesinos y agremiaciones, así como intensificar la población.

Sin embargo The Economist señala que Duque escogió un gabinete variado y tecnócrata, con la mitad siendo mujeres, que le permitirá actuar de forma más libre y reducir la denominada “mermelada”. Pero resalta que debe conectarse más con la sociedad y conocer lo que se vive en los territorios.