La “trampa” que quedó al descubierto con la primera operación que la<strong> Fiscalía</strong> bautizó como <strong>“mermelada tóxica”</strong> y que dejó la captura de ocho personas y la solicitud de investigación para un senador, también reveló una compleja red de corrupción en la entidad que promueve <strong>el deporte en el país,</strong> <strong>Coldeportes</strong> y a través de la firma de contratos para la construcción de<strong> escenarios deportivos. </strong>Uno de los capturados por las irregularidades en un millonario contrato para la construcción de una cancha de fútbol en el municipio de<strong> El Peñón, Bolívar</strong>, resultó ser un <strong>ex funcionario de Coldeportes y propietario de la empresa contratista. </strong>Carlos Hernán Rivera aparece reseñado en las declaraciones que tiene la Fiscalía en dos escenarios: como un conocido contratista y también como funcionario de Coldeportes. El problema es que, según los investigadores y sus ex empleados, <strong>en algunos momentos fungió los dos cargos. </strong>En cuerpo ajeno Rivera manejaba una empresa contratista conocida como <strong>Constru Sport</strong>, que de acuerdo con las declaraciones consignadas en la investigación de la<strong> “mermelada tóxica”</strong>, se anotó al menos 14 proyectos con <strong>Coldeportes</strong> y en diferentes municipios, sin importar que el contratista era funcionario de la entidad. La especialidad de <strong>Constru Sport </strong>y su gerente fantasma, eran los proyectos en <strong>municipios apartados.</strong> Así quedó claro para la<strong> Fiscalía</strong> luego de escuchar en declaración a <strong>Jonathan Puentes,</strong> quien fue representante legal de la empresa, pero solo como fachada para evitar que su jefe, Rivera, quedara en evidencia. “Carlos no podía aparecer como representante porque era funcionario de Coldeportes a <strong>finales de 2015 e inicios de 2016</strong> cuando hicimos unos siete y ocho proyectos para <strong>Coldeportes</strong>”, se lee en las declaraciones que tiene la <strong>Fiscalía. </strong>Puentes explicó cómo funcionaba la contratación y qu<strong>e el objetivo era quedarse con los proyectos</strong> así las propuestas no cumplieran con los requisitos técnicos y legales, lo importante era contar con el<strong> apoyo de alcaldes</strong> y de quienes tomaban las decisiones en<strong> Coldeportes y otras entidades. </strong>“Llegábamos por recomendaciones, nosotros hacíamos los diseños, pero como todo era sobre el tiempo lo único que hacíamos era<strong> presentar sin cumplir</strong> con los requerimientos solo para obtener el radicado y<strong> Carlos nos pedía firmar los planos de otras personas</strong>”, contó Puentes a los investigadores. Los proyectos estaban garantizados para <strong>Constru Sport </strong> y hasta funcionarios de <strong>Coldeportes participaban en la finalización</strong> de los diseños, se encargaban de digitalizarlos y acomodarlos a las exigencias de la entidad, todo a cambio de<strong> 4 millones de pesos. </strong>Un hecho sin precedentes en la arquitectura develó la investigación. <strong>Constru Sport </strong>y su escondido gerente convirtieron los diseños de un escenario deportivo en <strong>Puerto Inírida, Guainía,</strong> en un ejemplo nacional. La Fiscalía estableció que esos diseños fueron utilizados en la postulación de otros 14 proyectos que <strong>Constru Sport </strong>llevó a <strong>Coldeportes</strong>. Lo único que hicieron fue <strong>alterar nombres, firmas y fechas</strong> para convertirlos en una propuesta que estaba destinada a ganar. “Los diseños se usaron en muchos proyectos,<strong> sin levantamiento topográfico</strong>… Los arquitectos no sabían, la información era alterada a conveniencia de cada proyecto, hacer cambios era fácil pues ya estaban digitales”, señaló en empleada de <strong>Constru Sport</strong> entrevistada por la<strong> Fiscalía.</strong> En las inspecciones que adelantó la<strong> Fiscalía a Coldeportes</strong> encontraron planos que estaban <strong>tachados, con enmendaduras y sellos sobrepuestos</strong>, que más tarde los arquitectos responsables negaron firmar. <strong>Constru Sport</strong>, según la declaración de quien fue su <strong>representante legal,</strong> Jonathan Puentes, era una empresa dedicada a la construcción piscinas y estaba <strong>a nombre del padre Carlos Hernán Rivera,</strong> el ex funcionario de Coldeportes, pero decidió trasladarla a un apartamento en Bogotá. Dice Puentes en sus declaraciones que los<strong> arquitectos</strong> trabajaban en un cuarto de servicio junto a la cocina del apartamento, allí acomodaron unos computadores y <strong>maquillaban los diseños</strong> que luego presentaban a<strong> Coldeportes.</strong> “La oficina o el área de trabajo de nosotros era el <strong>cuarto de servicio</strong> al lado de la cocina, allí se ubicaban los computadores”, dijo el representante legal de <strong>Constru Sport S. A. S</strong> en ese momento. El mismo Puentes le dijo a la Fiscalía que en ese apartamento de su jefe,<strong> Carlos Rivera</strong>, recibía a alcaldes, diputados y contratistas interesados en lucrativos proyectos en los <strong>municipios. </strong>“En un par de oportunidades fue un señor costeño a ofrecer cupos a los alcaldes para<strong> financiamiento de los proyectos,</strong> no recuerdo el nombre pero sé por lo que escuché desde la cocina que estaba haciendo una <strong>negociación con un alcalde”.</strong>