Angela Merkel hace mercado a 72 horas de las elecciones
¿Qué hace la mujer más poderosa de Europa un viernes a las 11:00 de la mañana a solo tres días de unas elecciones que están destinadas a catapultarla a la historia? La compra

Mientras la oposición de izquierda pide una movilización máxima en las 72 horas que quedan hasta los comicios, la canciller alemana, Angela Merkel, empujaba el carrito y recogía los alimentos que acababa de comprar en un supermercado del centro de Berlín, a solo unos minutos en coche desde la Cancillería, según pudo comprobar El País
Llama la atención la normalidad con la que los clientes del establecimiento reaccionaban ante la presencia de la líder del país. Nadie se acercaba a ella para felicitarle ni para recriminarle nada. Cada uno seguía a lo suyo como si Merkel fuera uno más. Solo se veía alguna cara de sorpresa al reconocerla. “Sí, es ella”, le susurraba a su hija una mujer
Mientras la canciller elegía las verduras, pagaba en la caja o llenaba la bolsa de la compra, dos guardaespaldas vigilaban de lejos la escena, sin tener que intervenir en ningún momento. Merkel, con gesto serio y tomándose su tiempo en cada estante, permanecía ajena. A la salida, y con los guardasespaldas cargando la compra, le esperaba el coche oficial. Una vez dentro, la líder alemana ya puede volver a su trabajo. Que en su caso supone ganar de nuevo unas elecciones para convertirse, una vez más, en la jefa de Gobierno de su país y la política con más influencia en el continente.



