A las 20:41 del miércoles 24 de julio el<strong> tren Alvia de la ruta Madrid-Ferrol </strong>se descarrilaba a pocos kilómetros de <strong>Santiago de Compostela en Galicia, España"Tiene un trazado distinto al resto del recorrido", dice, en referencia a los últimos tres o cuatro kilómetros que incluyen la entrada en la estación de Santiago de Compostela"Se decidió así porque es un área totalmente urbanizada", agregaEl accidente tuvo lugar poco después de la salida de un túnel, en una curva pronunciada en comparación con los kilómetros previos de la ruta, que está diseñada para que pasen trenes a una velocidad de hasta <strong>350 km/hora</strong>, explica el expertoEl límite de velocidad a la altura de la curva es mucho menor: 80km/hora. Mientras que otras curvas en esa línea ferroviaria pueden tener unos 7.000 metros de largo, en el lugar del accidente el radio de giro de la curva es menor."Ese radio es lo que condiciona la velocidad a la que puede ir el tren", aseguró OrtízEl mismo día de la inauguración de este tramo, en <strong>2011</strong>, un<strong> periodista de El País Galicia </strong>que viajaba en el tren describió haber sentido un "bandazo" al pasar por la curva donde tuvo lugar el accidente. "Sí, eso seguro, yo iba, y lo que hubo fue la sensación de la inercia muy fuerte", confirmó <strong>David Reinero</strong>Sin embargo, más allá de que el tramo sea complicado, los expertos coinciden en que el diseño de la ruta no fue el problema<strong>"Yo estoy convencido de que el diseño de la curva es impecable", </strong>señaló Antonio Papell, vocero del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de EspañaPor su parte <strong>Nárdiz Ortiz</strong> dijo que "sabemos que el trazado es distinto a esta altura, pero eso en principio no tenía por qué ser un problema desde el punto de vista de la seguridad y de hecho no lo ha sido hasta ahora durante estos dos últimos años""Según declaraciones del propio maquinista, que es el único dato objetivo que tenemos en este momento a falta de las investigaciones judicial y técnico, <strong>el tren iba a 190 km/hr</strong>", afirmó Antonio Papell, vocero del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de EspañaLa <strong>compañía estatal operadora de trenes en España, Renfe</strong>, indicó a los medios que no se había informado de problemas técnicos con el trenLa atención, entonces, se centra ahora en los sistemas de seguridad con que trenes y vías de media y alta velocidad deben contar"¿Cómo un tren de alta velocidad pudo viajar a esa velocidad sin ser detenido por los modernos sistemas automatizados de protección?", señaló <strong>Sim Harris, experto en trenes de la revista británica Rail News</strong>Estos sistemas, explica el experto, están diseñados para evitar precisamente lo que ocurrió en este evento: prevenir que los trenes pierdan el controlAdemás, agrega, las vías están continuamente monitoreadas por una serie de sofisticadas redes eléctricas que pueden tomar el control de los motores para reducir la velocidad del tren o incluso detenerloPero siendo un <strong>tren moderno </strong>era capaz de alcanzar una velocidad de 250 km/h. En España, que está actualmente modernizando su <strong>red ferroviaria</strong>, varias de las líneas de alta velocidad comienzan como vías convencionales y continúan en tramos de alta velocidad"Son líneas 'híbridas' -o mixtas- que existen en muchos países, pero esto no debería ser un factor en el accidente" dice Harris. Sin embargo, el tramo donde ocurrió el accidente ya había sido completamente modernizado, según explica PapellEl ingeniero explica que<strong> la ruta Madrid-Ferrol</strong>, que era la que seguía el tren siniestrado, se divide en tres tramos. El primero, <strong>Madrid-Olmedo </strong>es un tramo de alta velocidad construido íntegramente exclusivamente para alta velocidad. De <strong>Olmedo a Ourense</strong>, el tramo era de vía convencional, porque se está construyendo el de alta velocidad. Y de <strong>Ourense a Ferrol</strong>, donde ocurrió el accidente "no es híbrido""La vía era vía de alta velocidad y tenía instalados los dos sistemas que se utilizan en España para el control del tráfico ferroviario", aseguró el ingenieroLa mayoría de los tramos modernos de la red ferroviaria utilizan una tecnología llamada <strong>European Rail Traffic Management System (ERTMS) (Sistema de Gestión del Tráfico Ferroviario Europeo)</strong>"Es una especie de <strong>piloto automático</strong>. El tren no puede tener velocidades diferentes de las programadas en los diferentes tramos y aunque el conductor tuviera un accidente, se volviera loco o se pusiera enfermo, el tren no sufriría ningún daño", asegura el PapellEl tren cada cierto tiempo le reclama una respuesta al conductor. Y si no la recibe, se detiene, según explica PapellSin embargo, <strong>justo el punto del tramo donde ocurrió el accidente no contaba con este sistema</strong>"El sistema de seguridad que viene hasta 3 o 4 kilómetros antes es el <strong>ERTMS</strong> y después pasa al <strong>ASFA digital </strong>que en sí mismo es un sistema seguro", indicó <strong>Miguel Ángel Cilleros</strong>, <strong>secretario general de la Federación de Transportes de UGT y miembro del Consejo de Administración de Renfe, a la Cadena Ser</strong>El ASFA es un sistema más antiguo y menos sofisticado que se basa en una serie de balizas magnéticas que se ponen cada ciertos metros de la vía"Si la baliza detecta que hay alguna irregularidad, puede provocar una emergencia, es decir un frenado automático que detiene el tren", explica el ingeniero PapellEn consulta con el <strong>Administrador de Infraestructuras Ferroviarias de España (Adif)</strong>, organismo encargado de las vías, el cual confirmó a través de su oficina de prensa que el punto donde ocurrió el accidente sólo contaba con el sistema ASFA<strong>¿Un sistema de control antiguo que no funcionó?</strong>Los expertos afirman que cualquiera de los sistemas hubiera alertado al conductor sobre los límites de velocidad"Con estos sistemas es imposible que un conductor viole los límites de velocidad", afirma Harris"Cuando el tren sobrepasa por 5 kilómetros el límite de velocidad, suena una alarma. <strong>Si se sobrepasa por 9 km suena otra alarma y a los 15 km sobre el límite de velocidad se dispara el sistema de frenos y el tren ya no puede continuar</strong>", asegura HarrisSin embargo, el sistema ASFA es para velocidad baja y media. Es decir, funciona sólo hasta los 200 km/h. "A partir de ahí ya no es eficaz este sistema", comenta el PapellDe confirmarse la versión del maquinista, de que el sistema debió haberse activado. "Podrían haber pasado dos cosas: o que estuviera estropeado o que hubieran funcionado. Yo creo que no se puede descartar que hubieran funcionado y que el accidente se haya producido por un frenado súbito del tren", señala PapellSin embargo, tanto los testimonios de los testigos como el video del choque parecieran descartar la teoría de que el tren frenó antes del impacto<strong>Existe una tercera potencial explicación</strong>, pero que contradiría los antecedentes hasta ahora conocidosSi el tren hubiese pasado del tramo controlado por el <strong>sistema nuevo, ERTMS</strong>, al tramo controlado sólo por el <strong>sistema antiguo, ASFA</strong>, a más de 200 km/h, éste último no habría sido capaz de activarse. "No hubiera tenido sistema de protección", dice el ingeniero PapellLas autoridades de transporte españolas aún están en las etapas tempranas de la investigación sobre las causas del accidente, y sólo será el resultado final de ese proceso el que finalmente diga lo que realmente ocurrió