Hallazgo podría explicar misterio de Alzheimer
Una pequeña empresa australiana de biotecnología podría haber descubierto algo que ayudaría a explicar el misterio de la enfermedad de Alzheimer y proporcionaría una nueva dirección a los investigadores que buscan tratamientos para este padecimiento cerebral.
NUEVA YORK .--- Una pequeña empresa australiana de biotecnología podría haber descubierto algo que ayudaría a explicar el misterio de la enfermedad de Alzheimer y proporcionaría una nueva dirección a los investigadores que buscan tratamientos para este padecimiento cerebral.La empresa Prana Biotechnology Ltd , que tiene su sede en Melbourne y cotiza en el mercado Nasdaq así como en el Mercado de Acciones de Australia, realizó recientemente una pequeña prueba clínica donde comprobó que un antiguo antibiótico, combinado con Aricept, el medicamento principal para tratar la enfermedad de Alzheimer, es más eficaz que la terapia con Aricept solamente.La mayoría de los científicos que investigan la enfermedad de Alzheimer ha dicho que los resultados preliminares de la prueba clínica, que involucra a 36 pacientes, se derivan de una muestra muy pequeña como para inferir que el medicamento funcionará en un sector más amplio de la población.Sin embargo, estos científicos consideran que dichos resultados son intrigantes como para garantizar una mayor atención sobre el tema.El mercado de los medicamentos para el Alzheimer casi alcanza los 1.000 millones de dólares, según la firma de investigaciones Decision Resources Inc."Estos estudios son muy útiles", dijo Paul Herrling, presidente de investigación corporativa de la empresa Novartis AG . "Estoy ansioso por ver todos los resultados".Los experimentos de Prana se basan en una teoría nueva y potencialmente revolucionaria sobre las causas del mal de Alzheimer, cuyos síntomas progresivos abarcan desde pérdida de la memoria hasta la demencia y, posteriormente, la muerte. Esta enfermedad afecta a cuatro millones de estadounidenses.Ashley Bush, profesor asociado de psiquiatría de la Escuela de Medicina de Harvard, cree que los depósitos de proteínas que se acumulan en el cerebro de los pacientes con Alzheimer, y que a menudo se identifican como la causa de la enfermedad, sólo son signos.Estos depósitos, conocidos como placa, se forman porque el cerebro pierde su habilidad para metabolizar los metales, especialmente el cobre y el cinc, los cuales están presentes en todos los humanos y son esenciales para la supervivencia, dijo Bush.La placa consiste en acumulaciones de proteínas, conocidascomo beta-amiloides, que se adhieren entre sí. Se supone que la proteína amiloidea elimina los metales del cerebro. Sin embargo, en los pacientes con Alzheimer, esta proteína invierte su papel y, en vez de desecharlos, se une a ellos, especialmenteal cobre.El exceso de cobre produce peróxido de hidrógeno, que hace que las células del cerebro se oxiden y mueran. Esta muerte celular, no la placa en sí, es la que origina la enfermedad, explicó."Las placas sólo representan el cráter de una bomba", dijo Bush. "No constituyen un campo de batalla. Todo lo que uno sabe es que, en el fondo, el tejido está luchando para lidiar con el metabolismo de los metales".Prana ha resucitado el clioquinol, un antibiótico que su fabricante retiró del mercado hace unos 30 años, después que miles de japoneses que tomaron altas dosis del producto, vendido sin receta para la digestión, desarrollaron una deficiencia de vitamina B que, en algunos casos, condujo a la ceguera.No está claro si los efectos colaterales fueron el resultado del uso excesivo, como sospecha Prana, o de una predisposición genética entre los japoneses, como creen otros."Este fármaco tiene su arrastre", dijo Kevin Felsenstein, investigador de Johnson & Johnson especializado en la enfermedad de Alzheimer y otros trastornos neurodegenerativos.Prana está administrando vitamina B a sus pacientes en las pruebas clínicas y ha dicho que hasta ahora no ha detectado ningúnproblema grave.El fármaco podría ser eficaz para probar la teoría de Bush y proporcionar un nuevo foco para las investigaciones con unos pocos medicamentos candidatos. Los tratamientos existentes mitigan los signos de manera temporal, pero no son eficaces para retrasar el curso de la enfermedad."No hay nada extraordinario en el mercado", dijo Felsenstein.Por su parte, el fabricante irlandés de medicamentos, Elan Corp y su socio Wyeth, antiguamente conocido como American Home Products Corp, detuvieron el desarrollo de una vacuna contra la enfermedad de Alzheimer después que algunos pacientes experimentaron una inflamación en el sistema nervioso central.Otras grandes farmacéuticas están buscando nuevas avenidas para sus investigaciones, pero todas están plagadas de problemas.Prana es una de las pocas compañías con un fármaco promisorio contra la enfermedad de Alzheimer. Su rival más cercano es la empresa de biotecnología canadiense, Neurochem Inc , que recientemente recibió la aprobación de la Dirección de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos para conducir pruebas de su medicamento, Alzhemed, con 48 pacientes en un período de tres meses.El fármaco de Neurochem impide que ciertos azúcares se adhieran a las proteínas amiloideas, lo que hace que las amiloides cambien su estructura y formen placas. Sin embargo, al detener la formación de placa se puede impedir la progresiónde la enfermedad.El método de Neurochem, que señala a la placa, en vez de a los metales, como la causa del Alzheimer, es menos radical que Prana y se mantiene más acorde al pensamiento científico actual.Sin embargo, la teoría de Prana posee el encanto de lo nuevo y los resultados preliminares de sus pruebas clínicas son promisorios.Herrling, de Novartis, cuyo laboratorio también está buscando fármacos para disminuir la formación de placa, admite que ésta no es la única ni la principal causa de la enfermedad de Alzheimer."Si se pudiera hallar un beneficio que apuntara hacia el efecto de adhesión al hierro del fármaco de Prana, entonces se habría probado que esos metales desempeñan un papel agresivo en la enfermedad", indicó Herrling.Si Bush puede probar esto, añadió Herrling, "obtendría el premio Nobel y, además, se enriquecería".



