Grafiteros fueron multados en Tunja por mural alusivo al desmonte del ESMAD
La pieza artística se realizó por artistas-muralistas de una ONG, cuyo mensaje era controlar la represión y el uso desmedido de la fuerza pública.
Tunja (Colombia)
Tres artistas o muralistas, crearon sobre la Avenida Norte de Tunja una pieza en la que muestra a un agente del Esmad disparando hacia un grupo de manifestantes, y la bautizaron ‘Boyacá Resiste’.
Enseguida fueron abordados por la Policía Metropolitana de Tunja, quienes les ordenaron borrar el grafiti, ya que según los uniformados, los ciudadanos “no tenían permiso para realizar esa conducta, y esa zona estaría prohibida para la fijación de murales de este tipo”.
Ante la negativa de los muralistas, fueron detenidos y multados con un comparendo Tipo 2 (que consta de una sanción pecuniaria de $234.080).
De acuerdo con los grafiteros, esta pared ha sido utilizada desde hace muchos años para realizar sus ilustraciones, y contrario a lo que dicen las autoridades, defienden que se trata de un material artístico que no altera el orden ni la convivencia de los ciudadanos, y que no trasgrede derecho alguno, es decir, que no se configura ningún delito.
El presidente de la corporación Tejiendo Raíces, Sergio Forero, uno de los artistas multados, explicó en Caracol Radio que “somos parte de una ONG que desde los barrios y las veredas hemos buscado por medio del arte expresar las necesidades más sentidas de las comunidades. Este mural tenía un diseño de unas letras que configuraban la palabra RESISTE, y al lado izquierdo tenia dibujado un Agente del Esmad”.
Agregó que la policía si tuvo información de que este grupo de artistas realizaría esta obra urbana, la cual se hizo con una planeación de aproximadamente cinco días.
“Cuando arrancamos la intervención artística, se nos acercaron los policías; les explicamos lo que íbamos a realizar, y posteriormente nos dejaron continuar con la actividad, en ese momento no les incomodó lo que íbamos a pintar. Al quinto día de nuestro trabajo, cuando ya estaba finalizado el mural, que a propósito se trata de una crítica a la represión policial contra la manifestación social en cuya agenda, entre otras cosas, se encuentra el desmonte del Esmad, llegó una patrulla de la policía, nos dijeron que tenían la orden de un superior para que detuviéramos la obra”, indicó Forero.
Forero mencionó que “en efecto, el superior de los uniformados, nos dijo que teníamos que borrar al agente del Esmad que habíamos pintado y como nos negamos, nos subieron a la patrulla y nos llevaron a un centro de convivencia donde nos interrogó el personal de la Sijín de forma muy incómoda; nos cuestionaron absolutamente todo lo que hacemos por medio de nuestra ONG, y posteriormente, nos impartieron un comparendo Tipo Dos”.
Por su parte la teniente Ángela Rodríguez, jefe de la Oficina Jurídica de la Policía Metropolitana de Tunja, manifestó que “el procedimiento realizado tiene que ver con un comportamiento contrario a la convivencia enmarcado en la Ley 1801, es decir en codo nacional de seguridad y convivencia ciudadana, artículo 140 numeral 9, toda vez que prohíbe fijar o dibujar grafitis, leyendas en paredes o en sitios de espacio público in contar con un permiso de la administración municipal”.
Agregó que “lo anterior generó que se impusiera la orden de comparendo que genero la multa tipo dos y la reparación al daño que se realizó en el bien inmueble. Si bien es cierto la orden de comparendo la impuso la policía, la medida correctiva que esto genera es competencia y atribución del inspector de policía. Por esto es allí, dentro del debido proceso, que se le indico a los 3 ciudadanos involucrados en esta falta o comportamiento contrario a la convivencia, a que se dirijan dentro de los 3 días hábiles a la inspección de policía de la jurisdicción para que se les defina la medida correctiva”.
Lea también: Minuto a minuto de la movilidad en la manifestación del 21 de enero
Sin embargo, Forero afirmó que “nos parece sorprendente e inexplicable lo que sucedió porque nosotros simplemente lo que nosotros estamos empuñando eran pinceles y en un lugar donde históricamente se ha intervenido el mural. Nosotros diariamente nos estamos agrediendo y la idea es que este tipo de expresiones no se censuren sino que aporten a la libertad y a la sana convivencia”.
El caso ocurrido horas antes de las movilizaciones programadas para este 21 de enero fue calificado por los muralistas como una censura y aseguran que la sanción se dio por la incomodidad de la policía más no por una actuación ilegal, lo cual lo defenderán de forma legal.
“En este momento estamos siendo asesorados por varios abogados para apelar el comparendo, pero lo más importante, para que no nos borren el mural, pues lo que nos quieren poner a hacer, es obligarnos a borrar el mural como multa, y consideramos que definitivamente no es un buen mensaje en medio de la coyuntura que atraviesa el país”, concluyó Forero.