Efectivo truco para hacer lasaña de pollo y espinaca perfecta: Receta e ingredientes
Le contamos todo lo que debe saber sobre esta preparación y la manera de prepararla con para alcanzar la mayor calidad posible,

Lasagna de pollo de espinaca, imagen de referencia (Getty Images). / Ekaterina Parfenova
En principio, es importante que sepa que la receta de lasaña de pollo con espinaca es principalmente reconocida por su equilibrio entre sabor, textura y valor nutricional.
Cabe destacar que este plato tiene raíces italianas que datan del Imperio Romano, pero ha evolucionado hasta adaptarse a diversas comunidades.
La buena aceptación de esta receta radica en la combinación de proteínas magras como el pollo, vegetales como la espinaca y una mezcla de quesos cremosos, que aportan una experiencia multisensorial.
Por otra parte, es considerada como una preparación accesible y rendidora, perfecta para familias y ocasiones especiales. Puede prepararse con ingredientes de alta calidad, como quesos artesanales o pollo orgánico, por lo que se asocia a la cocina casera refinada y saludable.
Por el lado de los restaurantes, tiende a presentarse como una opción sofisticada, sin perder su carácter reconfortante.
Además, su versatilidad y capacidad de adaptación a diferentes públicos y niveles de exigencia la consolidan como un producto gastronómico valorado y representativo de la cocina de calidad.
¿Qué debe tener en cuenta sobre esta preparación?
Esta receta cuenta con un alto valor nutricional, a diferencia de versiones más pesadas, esta combinación puede ofrecer una excelente fuente de proteína magra, hierro vegetal, fibra y calcio, favoreciendo la salud ósea y muscular.
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Por su parte, la espinaca contiene compuestos antioxidantes como la luteína y la zeaxantina, relacionados con la salud ocular.
Adicionalmente, la cocción de la espinaca con grasa mejora la absorción de sus vitaminas liposolubles, como la A y la K.
¿Cómo preparar lasaña de pollo con espinaca?
Ingredientes (para entre 6 y 8 porciones):
Para el relleno: 2 cucharadas de mantequilla; 1 cucharada de aceite de oliva; 4 dientes de ajo finamente picados; 1 cebolla blanca grande picada finamente; 300 g de espinaca fresca; 500 g de pechuga de pollo cocinada y desmenuzada; 190 g de queso crema; 200 ml de crema de leche; 100 ml de leche entera; ½ cucharadita de nuez moscada; sal al gusto; pimienta negra recién molida al gusto.
Para el momento de armarla: 1 paquete de láminas de lasaña; 200 g de queso mozzarella rallado; 150 g de queso parmesano rallado; 100 g de queso manchego o gouda; aceite o mantequilla para engrasar el molde; otros 100 ml de crema de leche.
Preparación
- En un sartén grande, derrita la mantequilla junto con el aceite de oliva.
- Sofría el ajo y la cebolla a fuego medio hasta que estén transparentes.
- Agregue la espinaca poco a poco hasta que se reduzca y suelte su líquido. Cocine hasta que esté bien suave. Si usa espinaca congelada, asegúrese de escurrirla completamente antes de añadir.
- Incorpore el pollo desmenuzado y mezcla bien.
- Añade el queso crema en trozos, la crema de leche y la leche. Revuelva suavemente hasta que el queso se derrita y se forme una mezcla cremosa.
- Sazone con sal, pimienta y la nuez moscada. Cocine a fuego bajo por 5 minutos más para que todos los sabores se integren y luego retire del fuego.
- A continuación, precaliente el horno a 425 °F (220 °C).
- Engrase la refractaria con mantequilla o aceite.
- Coloque una ligera capa de crema de leche en el fondo del molde para evitar que las láminas se peguen.
- Comience con una capa de láminas de lasaña, luego una capa del relleno de pollo y espinaca, y cúbralo con una mezcla de los tres quesos (mozzarella, parmesano y manchego).
- Repita este proceso hasta formar de 4 a 5 capas, terminando con una capa generosa de quesos por encima.
- Cubra la refractaria con papel aluminio y hornee entre 35 y 40 minutos.
- Retire el papel aluminio y hornee de 10 a 15 minutos más o hasta que la superficie esté dorada y burbujeante.
- Deje reposar al menos 10 minutos antes de servir, para que se asiente y se corte bien.
El truco para que la lasaña de pollo con espinaca quede perfecta
Es importante lograr un relleno cremoso, pero no aguado. Por ende, deberá equilibrar bien las capas sin sobrecargarlas y, sobre todo, dejarla reposar al menos 10 minutos tras el horneado para que tome firmeza.
Un toque final de queso parmesano con pan rallado y mantequilla crea una costra dorada irresistible que eleva el plato a otro nivel.
Consejos opcionales que puede implementar para elevar su receta
Puede agregar una pizca de chile seco o paprika al relleno para un toque picante; si le gusta más jugosa, añada entre las capas un poco de bechamel ligera o salsa blanca; se recomienda servir con una ensalada fresca con vinagreta de limón o balsámico para contrastar.