Colombia inició la implementación de la facturación electrónica en salud
El sector salud avanza en digitalización: facturación electrónica obligatoria con RIPS
Imagen de referencia vía Getty Images / d3sign
Desde este 1 de febrero, las instituciones de alto nivel de complejidad en Colombia dieron un paso crucial en la modernización del sistema de salud con la implementación obligatoria de la facturación electrónica con soporte en los Registros Individuales de Prestación de Servicios de Salud (RIPS). Esta medida, establecida en la Resolución 2275 de 2023 y actualizada en la Resolución 1884 de 2024, busca mejorar la eficiencia, trazabilidad y transparencia en la gestión de los servicios de salud.
La normativa, que se implementará en tres fases, obliga a todas las instituciones de salud a adoptar un sistema de facturación electrónica estandarizado que permitirá un control más preciso de los datos y la optimización de los procesos administrativos. Según el cronograma establecido:
- Instituciones de alto nivel de complejidad: debían iniciar el proceso entre el 1 de octubre de 2024 y el 1 de febrero de 2025.
- Instituciones de mediana complejidad: deberán comenzar entre el 1 de febrero de 2025 y el 1 de abril de 2025.
- Instituciones de baja complejidad y actores complementarios: tendrán plazo desde el 1 de abril de 2025 hasta el 1 de junio de 2025.
Beneficios y retos de la facturación electrónica en salud
Con esta implementación, el Ministerio de Salud y Protección Social busca optimizar el flujo de información y agilizar los pagos a las entidades prestadoras de salud. La directora vertical de Salud en Digital Ware, María Fernanda Isaacs, señaló que “la facturación electrónica en salud es un avance decisivo que representa un antes y un después en cómo el país gestiona los datos de atención, aumentando la confiabilidad de la información y la eficiencia del flujo de recursos en el sistema”.
No obstante, la adaptación a este nuevo modelo supone desafíos tecnológicos y administrativos para las instituciones de salud. La normativa exige que los prestadores generen archivos RIPS en formato JSON para su validación en la plataforma dispuesta por el Ministerio, un paso previo indispensable para el cobro a las entidades responsables del pago. Este proceso implica una reestructuración en la operatividad de los hospitales, clínicas y demás prestadores de servicios de salud, así como una mayor integración con proveedores tecnológicos especializados.
