Radio en vivo

Ciudades

Avanza la recuperación de la pieza histórica vandalizada por tierreros en Soacha

La iniciativa surge como respuesta al reciente hecho vandálico sufrido por el pictograma en Soacha, un testimonio invaluable de la historia ancestral de la región, que fue cubierto por pintura negra.

Recuperación pieza histórica en Soacha.

Soacha

El Instituto Colombiano de Antropología e Historia (ICAHN) y el Instituto Departamental de Cultura y Turismo (Idecut), se unieron para elaborar un informe técnico y una propuesta destinada a preservar el patrimonio cultural regional. La presentación de esta propuesta está programada para el próximo 24 de mayo en Soacha.

La iniciativa surge como respuesta al reciente hecho vandálico sufrido por el pictograma en Soacha, un testimonio invaluable de la historia ancestral de la región, que fue cubierto por pintura negra.

Durante una visita de expertos, se tomaron fotografías detalladas del pictograma utilizando un microscopio digital, con el objetivo de realizar un análisis exhaustivo que permita planificar su posible restauración a mediano plazo. Se considera crucial una intervención social previa para evitar futuros daños.

Estos esfuerzos representan un compromiso sólido hacia la conservación del arte rupestre, en línea con la importancia de proteger y promover la riqueza cultural de la región para las futuras generaciones.

Le puede interesar:

“El proyecto demuestra la importancia de la colaboración interdisciplinaria y el compromiso con la preservación del patrimonio cultural. Es fundamental garantizar que se tomen medidas efectivas para proteger el pictograma y su entorno, asegurando así su legado”, afirmó Alejandra Carrasco, subgerente de Turismo de Cundinamarca.

¿Qué le pasó al pictograma?

El emblemático pictograma del “Dios Varón” en Soacha, con más de mil años de historia, fue vandalizado por tierreros en busca de ganancias ilegales. La piedra, reconocida como un tesoro arqueológico, fue cubierta con pintura negra y las siglas FCR, en un acto que ha generado indignación entre congresistas, historiadores y residentes locales.