Indígena que había sido capturado con el soldado Orozco quedó en libertad

Bogotá D.C.

Este viernes se conoció que la persona que había sido detenida junto al soldado Alexander Orozco, señalado de ser un supuesto infiltrado de las disidencias FARC y de cometer una masacre en el batallón La Tagua en Putumayo, fue dejada en libertad en Puerto Leguizamo.

En un principio, el coronel Juan Ruíz, comandante de la Policía en Putumayo, indicó que dos personas, entre ellas el soldado Orozco, habían realizado varios disparos desde una embarcación sobre el río Caquetá contra los patrulleros que estaban acantonados.

De hecho, en un comunicado, las Fuerzas Militares señalaron que el soldado, quien horas antes habría asesinado a un capitán, un sargento y otro uniformado, fue sorprendido “con otro sujeto, al cual se investiga si es cómplice”.

El hombre es miembro de una comunidad indígena, identificado como Luis Evelio Rodríguez, y según el proceso judicial, no tenía nada que ver con el soldado ni tampoco con la masacre perpetrada en esa batallón. De hecho, no era el dueño de la canoa ni tenía la intención de transportar a Orozco para ayudarlo a escapar a la frontera con Perú después de cometer el crimen, como se dijo en versiones extraoficiales.

“El indígena estaba en la orilla del río Caquetá, junto con otros ciudadanos, mirando cómo la Policía Nacional llevaba a cabo un procedimiento que no era correcto, que no era el debido, contra el soldado del Ejército”, dijo a Caracol Radio Jhon Harold Ordoñez, delegado regional en el Putumayo de la Defensoría del Pueblo.

“Tiene conocimiento la Defensoría del Pueblo que por haber reclamado a los policías que no actuaran de esa manera, pues posteriormente fue capturado y puesto a disposición de la Fiscalía en Puerto Leguizamo”, señaló.

De otra parte, Ordoñez contó a Caracol Radio una versión que contradice a la presentada por el coronel Ruiz: que el soldado Orozco no llegó disparando y estaba solo en un bote con un remo en la orilla del río Caquetá. En los videos difundidos por la comunidad, se muestra al uniformado en la canoa cuando recibió varios impactos de bala por parte de los patrulleros y luego cayó al río.

“Tuvimos que representar judicialmente al indígena. Cuando rindió interrogatorio en la Fiscalía, le expuso las circunstancias de modo, tiempo y el lugar donde él se encontraba. Posteriormente, ordenó su libertad porque no se encontraron las pruebas que lo comprometieran”, señaló.

Para el defensor Ordoñez, la captura del indígena fue una retaliación de la Policía por haber reclamado por el procedimiento contra el soldado. “Fue solo una captura, pero hubiesen sido más. Es un acto no muy correcto por parte de los patrulleros”, indicó a Caracol Radio.

Por lo anterior, la Justicia Penal Militar abrió una indagación preliminar por el presunto delito de homicidio contra los dos patrulleros quienes, al parecer, estarían involucrados en los hechos en los que resultó herido el soldado regular Alexander Orozco y que, posteriormente, derivaron en su muerte. Su cuerpo está en la sede de Medicina Legal de Neiva.

“La indagación preliminar bajo radicado 640 de fecha 28 de febrero de 2024 se aperturó, inicialmente, por el delito de lesiones personales al conocerse que Orozco Zambrano resultó herido por proyectil de arma de fuego y fue rescatado con vida del río Caquetá, en cercanías a la Estación de Policía de La Tagua en Puerto Leguízamo”, señaló esa jurisdicción.

Sin embargo, una vez se confirmó el deceso del soldado quien, presuntamente, habría ocasionado la muerte de tres militares el pasado 26 de febrero, dentro del Batallón de Infantería de Selva N.°49, el despacho procedió a realizar la variación típica de la conducta punible de lesiones personales a homicidio.