Así están las pujas en Senado y Cámara para definir a los nuevos presidentes del Congreso

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Aunque faltan todavía seis meses para la elección de los nuevos presidentes del Senado y la Cámara de Representantes, ya empezaron las pujas tanto en el Partido Conservador como en el Partido Verde, colectividades a las que les corresponden estas dignidades, respectivamente, para la tercera legislatura, para definir a los sucesores de Iván Name y Andrés Calle.

En el Senado, donde le corresponde al conservatismo, el acuerdo inicial era que se postularía a Carlos Andrés Trujillo, expresidente del partido, quien justamente llevó a los godos a declararse inicialmente como partido de gobierno una vez Petro se posesionó. Sin embargo, queriendo evitar que llegue alguien cercano al ejecutivo, se empezó a barajar la opción de que Efraín Cepeda, el hoy presidente conservador, se lance y le compita a Trujillo.

Desde el entorno de Cepeda dicen que el senador podría ir ‘hasta el final’ en esta disputa, para que se garantice una separación de poderes y garantías para todos los sectores. Por su parte, Trujillo espera que se respete el acuerdo inicial, que fue por el cual dio un paso al costado en la presidencia del partido. Puede ser, como pasó esta legislatura con Name, que no haya un acuerdo total y se defina en voto limpio en plenaria.

En la Cámara pasa lo contrario. La favorita actualmente es la representante Katherine Miranda, quien de hecho ya ha tenido encuentros con Presidencia. Aunque ella ha sido una fuerte opositora de las reformas del Gobierno, desde su entorno aseguran que por parte del ejecutivo no habría ningún veto para que ella sea la nueva presidenta. Sin embargo, se espera que el Gobierno se mueva para intentar poner a alguien más cercano.

La ficha más opcionada para tal fin, en este momento, es el representante Santiago Osorio, quien llegó al Congreso lanzándose en coalición Verde-Pacto, lo cual muestra de entrada su mayor afinidad al ejecutivo. No tendrá una tarea fácil intentando arrebatarle la Presidencia de Cámara a Miranda, pues ella es una de las más experimentadas en esa cámara, fue la representante más votada en Bogotá y también es la que más adelantada tiene la gestión.

El Gobierno tendrá un rol clave en estas pujas, pues es el más interesado en tener el mayor control posible de las mesas directivas del Congreso, para que no se corran riesgo con el trámite de sus iniciativas. Si bien los partidos postulan a su o sus candidatos, la totalidad de senadores y de representantes son los que, respectivamente, votan para elegir a los nuevos presidentes.

Así las cosas, hay dos posibles escenarios. Puede pasar que haya un acuerdo total, una sola candidatura fuerte, como pasó con Andrés Calle en la Cámara, o que se vayan a voto limpio con dos opcionados, como sucedió con el hoy presidente del Senado Iván Name, que terminó ‘derrotando’ a su copartidaria Angélica Lozano, en lo que fue también una derrota para el Gobierno. De aquí al 20 de julio, cuando se elijan las nuevas mesas directivas, habrá muchas movidas, reuniones y pulsos al respecto.