Luis Alfredo Ramos, condenado por paramilitarismo, irá a nuevo juicio por Hidroituango

Bogotá D.C.

Ante la Corte Suprema de Justicia, la Fiscalía General acusó formalmente al exgobernador de Antioquia, Luis Alfredo Ramos, por el delito de interés indebido en celebración de contratos.

El exmandatario, condenado a 7 años de prisión por nexos con el paramilitarismo, responderá en otro juicio por presunta corrupción en la adjudicación de Hidroituango, el proyecto energético más importante del país.

De acuerdo con el escrito de acusación de la Fiscalía, presuntamente, Ramos habría intervenido para favorecer a Empresas Públicas de Medellín (EPM) y se quedara con el contrato de construcción y operación de la hidroeléctrica.

Los hechos ocurrieron mientras Ramos fungió como jefe departamental entre los años 2008 y 2011. Según el ente acusador, las irregularidades se presentaron en el contrato tipo BOOMT (construir, operar, poseer, mantener y transferir, por sus siglas en inglés) firmado entre Hidroituango S.A. y EPM.

Resulta que en el año 2010 se abrió la convocatoria internacional de precalificación para que las empresas interesadas en la construcción de la megaobra entraran en un proceso de selección.

Sin embargo, la Fiscalía encontró que Ramos, quien como gobernador tenía silla en la junta directiva, habría avalado que se cambiara la modalidad del proceso de contratación: de una invitación internacional a una selección directa.

“En síntesis, el acusado, con consciencia y voluntad, se interesó de manera indebida en la celebración del contrato BOOMT en favor de EPM y violó los principios de planeación, transparencia, economía, buena fe, responsabilidad y deber de selección objetiva”, dice el escrito de acusación de 87 páginas de la Fiscalía.

En la audiencia de este jueves, la Sala Especial de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia declaró víctimas en el proceso del juicio contra Ramos a la Gobernación de Antioquia y su Instituto para el Desarrollo de Antioquia (IDEA).