Este viernes en La Habana, el Gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional, ELN, alcanzaron un acuerdo que permitirá el cese de las hostilidades en los diferentes territorios del país entre los combatientes del grupo guerrillero y el ejército nacional. El pacto entre los grupos negociadores que conducen este proceso de paz en Cuba estará enmarcado en el reconocimiento del Derecho Internacional Humanitario como garantía de cumplimiento.

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¿Cuál es el objetivo del cese al juego?

Según lo acordado por las partes, la pausa en las hostilidades permitirá el desescalamiento del conflicto y facilitará las dinámicas humanitarias para así garantizar la participación en este proceso de paz de las personas que residen en las zonas de mayor crisis humanitaria.

El cese al fuego alcanzado en la mesa de negociaciones estará regido por principios ligados a las necesidades y características propias de los territorios desde un enfoque diferencial, étnico y territorial que acoja también la perspectiva de género en su ejecución.

¿Cómo se verificará el cumplimiento del cese al fuego?

Para la revisión y prevención de cualquier eventualidad se creará un Mecanismo de Monitoreo y Verificación que contará con integrantes del Gobierno nacional, el ELN, la iglesia católica y la ONU más un importante acompañamiento por parte de la veeduría social. Dicho mecanismo, de orden nacional, deberá articularse a nivel local y regional para abarcar lo que pueda ocurrir en los diferentes territorios.

Cada dos meses se realizarán evaluaciones conducidas por las partes negociantes y por el Mecanismo de Monitoreo y Verificación para identificar el estado y las posibilidades en el marco del cese al fuego.

¿Qué no se permitirá durante el cese al fuego?

La prohibición principal que obviamente acoge este acuerdo contempla la realización de acciones ofensivas por las partes negociadoras, incluyendo labores de inteligencia.

Se espera que este sea un acuerdo continuo y progresivo, para lo cual además del monitoreo y la evaluación, será también fundamental el cumplimiento de las órdenes impartidas desde los respectivos mandos en contienda, tanto de la Fuerza Pública, como del ELN, así como la actualización constante en materia de prohibiciones y acciones de desescalamiento.

El cese al fuego tiene también un importante componente territorial en su implementación, mediante el cual se busca el desarrollo de Acuerdos Humanitarios Territoriales con las comunidades afectadas por el conflicto armado y sus consecuencias.

¿Cuánto durará el cese al fuego?

Inicialmente, se espera que el cese al fuego tenga una duración de 180 días, comenzando el 3 de agosto, este rango de tiempo será prorrogable en atención al desarrollo de los avances logrados en el siguiente ciclo de negociaciones en La Habana.