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Canciller lideró acto de reconciliación con las víctimas de Juan Frio

En los hornos crematorios se sembró la esperanza

Acto de reconocimiento liderado por el canciller en Juan Frio.

Cúcuta

El canciller colombiano Álvaro Leyva llegó hasta el corregimiento de Juan Frío, epicentro de la violencia paramilitar hace 23 años para presidir un encuentro de responsabilidad extrajudicial en un acto de reconocimiento y reconciliación con las víctimas.

El lugar volvió a traer recuerdos, tristeza, llanto, rechazo, repudio e indignación para las víctimas que revivieron pasajes de las acciones del bloque Fronteras del paramilitarismo encabezadas por Salvatore Mancuso que estuvo de manera virtual participando.

Para el ministro de R elaciones Exteriores “aquí lo que hubo fue una degradación moral, y un golpe fundamental a lo que debiera ser una sociedad, aquí lo que hubo fue una destrucción de la sociedad colombiana”.

Y agregó “hay un sistema que se llama integral de verdad, justicia y reparación y no repetición. ¿Pero que sucede? Que los enunciados iniciales tienen una institución que cuida de esa manifestación la JEP. La que busca los desaparecidos, la comisión de la verdad, pero no había una institución que tuviera a su cargo la no repetición. Porque en la no repetición están los cimientos de la reconstrucción de la sociedad”.

Por su parte de las víctimas señalaron que “hoy día por la paz, por la vida y nunca más recordamos y llevamos el conflicto armado. Ustedes nos causaron tanto dolor, tristeza, impotencia, odio, como también las muertes a muchos inocentes, un camino muy difícil…”

Otro advirtió que “han pasado tantos años, y seguimos esperando una verdadera reparación colectiva. Por eso seguimos luchando desde diferentes escenarios, para que el gobierno cumpla con su deber de estado, seguimos esperando después de tantos años y tantas promesas incumplidas no se ha visto las acciones”.

En el marco de este evento, el canciller realizó un acto simbólico la siembra de un árbol en medio los hornos crematorios como señal de esperanza, en un camino de búsqueda hacía la verdad de lo que ocurrió allí donde las vidas se esfumaron entre Colombia y Venezuela.

Algunas organizaciones sociales cuestionaron el evento desde la ONG Progresar al advertir su director Wilfredo Cañizales que “ninguna entidad estatal ha tomado la decisión de intervenir esa zona a pesar de ser declarada de interés forense y darle respuesta adecuada a las familias buscadoras”.

Y advirtió que “los habitantes de esa población no han podido recuperar la tranquilidad pérdida por el accionar paramilitar”.