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Errores comunes al usar el aire acondicionado que aumentan su recibo de la luz

En época de vacaciones, estos tips pueden ayudarle al bolsillo y no sumar más consumo de energía.

Aire acondicionado

Durante esta semana santa son muchas las personas que aprovechan para salir de viaje y descansar de las labores del día a día. Así, hay quienes llegan a lugares con sensación térmica alta, por lo que uno de los aparatos que se convierte en indispensable, es el aire acondicionado.

No obstante, a la hora de usarlo puede estar cometiendo algunos errores que pueden dañar su funcionamiento, acortar su vida útil y provocar un aumento en el recibo de energía, afectando el bolsillo.

Errores comunes al usar el aire acondicionado

Dejarlo encendido todo el día

No es necesario tenerlo las 24 horas funcionando, sobretodo si va a salir o si no hay nadie en casa o en la habitación del hotel. Es mejor usarlo por intervalos de tiempo para aprovechar el ambiente fresco que deja; esto permitirá ahorrar energía y por consiguiente, dinero.

Ponerlo a una temperatura demasiado fría

Poner el aire acondicionado a una temperatura demasiado fría, es decir, por debajo de los 26ºC, puede ser un gran error, y no solo porque el gasto energético será mayor. El aire acondicionado no necesita una temperatura tan baja para enfriar una habitación. Es importante saber que el aparato enfriará el ambiente igual de rápido.

Además, a mayor gasto energético, mayor será la factura de la luz. Así que se aconseja establecer una temperatura de entre 20 y 25 grados cuando la sensación térmica es demasiado alta. Más allá de esta temperatura, el aire acondicionado empezará a realizar un mayor consumo de electricidad. Esto provocará que la factura de luz aumente entre el 6 y el 8%.

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No programar el aire acondicionado

Una de las opciones para ahorrar en la factura de luz es programar el apagado del aire acondicionado, sobre todo en las horas nocturnas. Dormir con el aire acondicionado no es la mejor opción, pero si el usuario lo hace, lo mejor es programar las horas de funcionamiento, así evitará un consumo excesivo.

No limpiar los filtros

Este punto es de vital importancia para el buen funcionamiento del equipo. Si se usa frecuentemente hay que hacer una limpieza mensual, pues de lo contrario existe el riesgo de que el aparato funcione forzado, lo que aumenta hasta un 5% más de consumo de luz. Mantener en buen estado el equipo de aire es sencillo y bastará con limpiar los filtros al menos una vez cada 12 meses.

La limpieza puede llevarse a cabo con agua y un producto de limpieza cualquiera. Los filtros no podrán volver a colocarse hasta que no estén completamente secos.

Usarlo con puertas y ventanas abiertas

Esto suele suceder casi siempre, sin embargo, es de los peores errores al usarlo, pues éste absorbe el aire caliente y eso representa mayor uso de luz. Además también aumenta la posibilidad de que se dañe más rápido de lo normal.

No usar el ventilador

En espacios muy grandes o amplios, se recomienda usar ambos aparatos para no forzar funcionamiento del aire acondicionado. Además, favorece la circulación de aire en todo el ambiente, lo cual ayuda a percibir 4 o 5 grados menos.

¿Cuánta luz consume un aparato de aire acondicionado?

El consumo de energía de un aparato de aire acondicionado puede variar significativamente dependiendo de varios factores, como la eficiencia energética del aparato, su capacidad, el tamaño de la habitación que se está enfriando y la temperatura ambiente exterior.

En promedio, un aparato de aire acondicionado puede consumir alrededor de 500 a 1440 vatios por hora, mientras que un sistema de aire acondicionado central puede consumir entre 3000 y 5000 vatios por hora. Sin embargo, estos números son solo un promedio.

El consumo de energía de un aire acondicionado también puede ser influenciado por el uso que se le dé. Por ejemplo, si se usa durante largos periodos de tiempo o se ajusta a temperaturas muy bajas, su consumo de energía será mayor.

Así puede ahorrar energía y dinero

  • El aire acondicionado debe ubicarse en la parte de la casa en donde menos llegue el sol.
  • Si no hay nadie en la habitación apagar el aire acondicionado, o activar el modo “ahorrar energía”
  • La temperatura ideal varía entre los 22 y 25 grados, en función de las personas.
  • Mientras más humedad haya, más hay que bajar la temperatura. En equipos con control de humedad, debe mantenerse entre el 40% y el 60% con respecto al aire.
  • Por cada grado que baje la temperatura es un 8% más tu recibo de luz.
  • No abra puertas y ventanas de la sala refrigerada para enfriar otras habitaciones sin aire acondicionado. No conseguirá el efecto deseado y gastará mucho más.