Más de 10 mil sismos en el Volcán Nevado del Ruiz el 1 de abril
El Servicio Geológico Colombiano entregó la información sobre el incremento de sismos en el Volcán Nevado del Ruiz, que continúa en nivel de actividad naranja
Manizales
10.400 sismos se registraron el primero de abril, 2 mil más que el 31 de marzo, uno de ellos de 3.1 de magnitud con epicentro en Villamaría, siendo este uno de los municipios de influencia del Volcán Nevado del Ruiz, este sismo se cataloga como uno de los más fuertes desde que inició el aumento de la actividad del volcán el pasado 24 de marzo.
John Makario Londoño, director de geoamenazas del Servicio Geológico Colombiano, dijo que “la actividad continúa en niveles altos, muy similares a los días anteriores, ocurrió el día anterior más de 10 mil sismos, uno de 3.1, la sismicidad se sigue concentrando en la parte sur del cráter a dos km y a las mismas profundidades, en conclusión, la actividad sigue alta, el volcán sigue muy inestable”.
El Servicio Geológico Colombiano registrando actividad sísmica relacionada al movimiento de fluidos al interior de los conductos volcánicos, la cual estuvo asociada a emisiones de ceniza confirmadas y a un leve incremento en la desgasificación con respecto al día anterior.
El volcán también ha emitido ceniza por lo que se ha visualizado columnas que han alcanzado los 1.200 metros medidos desde la cima del volcán, por lo que en los próximos días podría evidenciarse la caída de ceniza en Manizales, Chinchiná, Villamaría e incluso municipios como Santa Rosa de Cabal en Risaralda. Felix Ricardo Giraldo, jefe de la Unidad de Gestión del Riesgo de Caldas, informó sobre las medidas de prevención implementadas.
“Se realizó la visita al sector de Río Claro en Villamaría junto con la alcaldía municipal, la delegación minera del departamento de Caldas y la Unidad de Gestión del Riesgo con el fin de verificar el sistema de alarmas, el cual funcionó adecuadamente, se habló con las comunidades cerca a estas alarmas con el fin que conocieran como es el proceso de activación y poder tener una cadena de llamadas actualizadas con el fin de dar aviso oportuno a estas comunidades”, destacó el funcionario caldense.
Río Claro que desemboca en el río Chinchiná, es el afluente que más se está vigilando y monitoreando debido a que este es el mismo que en el año 1985 arrastró gran parte del material que generó la emergencia en Caldas tras la erupción del volcán.
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