Protestas en Ecuador: Policía disuelve manifestaciones en Quito con gases lacrimógenos
Persisten las protestas en Ecuador en contra de la eliminación del subsidio al diésel y del gobierno de Daniel Noboa.
Protestas Ecuador. Foto: Veronica Lombeida/SOPA Images/LightRocket via Getty Images / SOPA Images
La Policía Nacional de Ecuador impidió y dispersó con gases lacrimógenos una marcha en el centro de Quito, la ciudad capital del país.
Organizaciones indígenas junto a colectivos ambientalistas y animalistas convocaron esta concentración desde hace tres semanas con motivo del 12 de octubre, pero también se buscaba protestar contra el Gobierno del presidente Daniel Noboa.
La manifestación reunió a cientos de personas y partió desde el sector de Villaflora hacia el parque El Arbolito, tradicional punto de concentración de distintas movilizaciones en la capital ecuatoriana, pero los policías intervinieron con elementos antidisturbios para disolver la concentración.
Ecuador sigue agitado por las protestas en contra de la eliminación del subsidio al diésel, que hizo que el precio de este combustible pasase de 1,80 a más de 2,80 dólares por galón (3,78 litros).
Los manifestantes también marcharon por la reducción de tres puntos porcentuales del IVA hasta el 12% y en contra del referéndum convocado por el mandatario para instaurar una Asamblea Constituyente.
“Soy ama de casa, no soy terrorista”, “Somos madres”, “No somos terroristas”, son algunas de las pancartas que exhibían los participantes en esta manifestación en respuesta al tratamiento de “terroristas” que el Gobierno está dando a los protestantes contra Noboa.
Quito militarizada
En los días previos a esta marcha, el Gobierno desplegó más de seis mil militares en Quito para impedir que las protestas que desde hace tres semanas se registran en diversas provincias de los Andes y de la Amazonía ecuatoriana pudiesen llegar a la capital para una eventual “Toma de Quito”.
Las Fuerzas Armadas instalaron controles en los accesos a la ciudad para negar el ingreso a la ciudad de camiones con manifestantes que se trasladaban de otras provincias y locales al norte y al sur de Quito.
“Denunciamos la represión policial contra la marcha pacífica y ciudadana en Quito, en los alrededores del parque El Arbolito y la Casa de la Cultura”, advirtió en un mensaje en redes sociales la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), la mayor organización social del país que desde hace tres semanas convocó a un “paro nacional indefinido”.
“La movilización se desarrollaba de forma pacífica, cuando fuerzas policiales lanzaron gases lacrimógenos y dispersaron violentamente a los manifestantes, entre ellos mujeres, jóvenes y personas mayores”, añadió.
La confederación, que agrupa a las 14 nacionalidades y 18 pueblos indígenas que habitan en el territorio ecuatoriano, rechazó “el uso desmedido de la fuerza y responsabilizamos al Gobierno de Noboa por estos actos de violencia”.
Hasta el momento esta ola de protestas deja un fallecido por disparos presuntamente del Ejército, más de un centenar de heridos y más de un centenar de detenidos, entre ellos al menos una veintena enviados a prisión preventiva bajo imputaciones de terrorismo presentadas por la Fiscalía.
En otras ciudades hubo manifestaciones similares, como en Otavalo, ubicada la norteña provincia andina de Imbabura, que ha sido el epicentro de esta serie de protestas; al igual que la ciudad andina de Cuenca, capital de la provincia de Azuay, al sur del país.