Presidenta del Concejo de Cúcuta enfrenta proceso de pérdida de investidura
Carime Rodríguez rechazó los señalamientos en su contra.
Carime Rodríguez, concejal de Cúcuta / Foto: Redes sociales
Cúcuta.
La presidenta del Concejo de Cúcuta, Carime Rodríguez, enfrenta un proceso de pérdida de investidura tras una demanda presentada por la veeduría Flórez Ospina.
El recurso jurídico argumenta un presunto uso indebido de las redes sociales de la corporación para fortalecer su imagen política.
Desde los micrófonos de Caracol Radio, Rodríguez manifestó que recibe la notificación con serenidad y confianza en su labor.
“Con toda la tranquilidad puedo decir que las cosas dentro del Concejo se han hecho bien y de cara a la ciudad. Estos señalamientos son parte de la vida pública y de quienes no comparten la forma como hago política”, aseguró.
La dirigente señaló que su independencia frente a los jefes políticos ha generado incomodidades en algunos sectores.
“Soy una mujer que trabaja todos los días por Cúcuta, no estoy en un escritorio ni le lamboneo a nadie. Eso es lo que molesta, porque la imagen que he construido no es por propaganda sino por el trabajo en la ciudad”, enfatizó.
Rodríguez también defendió el uso de las plataformas digitales institucionales, al sostener que se trata de una práctica habitual en la corporación.
“No solo yo, los 19 concejales utilizan las redes sociales del Concejo. Como presidenta sigo siendo concejal, no puedo desprenderme de esa condición ni guardar en una cajita la credencial durante un año”, precisó.
La funcionaria recordó que desde hace 16 años una mujer no ocupaba la presidencia de la corporación, y sostuvo que esa visibilidad también genera resistencias.
“Hoy tenemos una mesa directiva activa, transparente y de cara a la ciudadanía. Eso a algunos les incomoda, pero lo único que puedo decir es que me defenderé en los estrados judiciales con respeto por la ley y por los ciudadanos”, agregó.
Finalmente, Rodríguez reconoció que las mujeres en la política local están más expuestas a ataques y cuestionamientos.
“A muchos no les gusta que mujeres sin padrinos políticos tengamos poder en la ciudad. Pero estoy dispuesta a asumir lo que venga, a darle la cara a la ciudadanía y a seguir trabajando con los concejales en los temas de salud, educación y control político que Cúcuta necesita”, puntualizó.