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Continúa el paro de la comunidad educativa en un colegio de Sardinata, Norte de Santander

Se instalará una mesa de trabajo con las autoridades municipales y departamentales.

Sardinata

Norte de Santander.

La Institución Educativa Monseñor Sarmiento Peralta, ubicada en el corregimiento de Las Mercedes, municipio de Sardinata, completa nueve días sin clases por la falta de personal docente, coordinadoras y personal administrativo.

La comunidad educativa mantiene bloqueado el colegio en protesta, mientras exige soluciones inmediatas a la Secretaría de Educación departamental.

Charles Ramírez, presidente de la Asociación de Padres de Familia, confirmó que, aunque ya fue asignada una docente de inglés, el problema de fondo persiste.

“Esta institución cumple 55 años sin una sola coordinadora, a pesar de que le corresponden dos. Tampoco tenemos secretaria, portero ni personal administrativo”, afirmó.

A la problemática se suma el deterioro de la infraestructura, especialmente del campo deportivo, cuya cubierta colapsó y representa un riesgo para los estudiantes.

“No podemos esperar a que ocurra una tragedia. Todo esto ya está advertido en las actas anteriores”, agregó Ramírez, quien además recordó que es la segunda vez que deben cerrar el colegio por las mismas razones.

Mientras tanto, los 950 estudiantes no han recibido clases y han participado en las marchas organizadas por la comunidad. El colegio permanece cerrado con cambio de candados como señal de presión.

“Nos preocupa especialmente el grado 11. Se acercan las pruebas Saber y están perdiendo tiempo valioso”, señaló.

La comunidad también denunció que la mayoría de los docentes de secundaria están cubriendo horas extras sin recibir pago.

“Están regalando tres o cuatro horas diarias. Lo hacen por compromiso con los estudiantes, pero esto no puede seguir así. La Secretaría de Educación ya tiene conocimiento, pero no responde”, indicó.

Hoy se instalará una mesa de trabajo con presencia de la Secretaría de Educación departamental y la alcaldesa Diomara Montañez, donde se espera que se definan soluciones concretas frente a las peticiones: el nombramiento de coordinadoras, mejoras en la infraestructura y la garantía de condiciones dignas para una comunidad históricamente golpeada por el conflicto.