Qué hacer para que no se encoja la carne de hamburguesa: Tipo de carne recomendada, técnicas y más
Le contamos todos los trucos que necesita para obtener una carne jugosa, rica y que no se encoja.

Hamburguesa, imagen de referencia (Getty Images). / novanym 95 / 500px
Las hamburguesas tuvieron un auge, que comenzó con la industrialización de la alimentación en Estados Unidos a finales del siglo XIX y principios del XX, cuando el crecimiento urbano y la demanda de comidas rápidas impulsaron su expansión.
Cabe destacar que los restaurantes de comida rápida, como McDonald’s, convirtieron a la carne de hamburguesa en un símbolo de eficiencia y estandarización, alineándose con la lógica capitalista de producción en masa y reducción de costos.
Por otra parte, la hamburguesa representa la industrialización alimentaria: carne barata, procesada a gran escala y distribuida globalmente.
Es importante hacer énfasis en que su éxito se debe a la optimización de cadenas de suministro y la publicidad, que la asociaron con placer y conveniencia.
Adicionalmente, es un producto aspiracional en muchos países, donde comer hamburguesas puede simbolizar modernidad y estatus. Este producto tiende a estar relacionado con el ‘sueño americano’ y la globalización, promovida por empresas multinacionales.
Asimismo, su aparición en el cine y la publicidad refuerza su imagen como un placer accesible que se transformó en uno de las insignias del capitalismo contemporáneo.
¿Qué es importante que sepa sobre la carne de hamburguesa?
En primer lugar, hay que decir que no toda la carne molida es igual; la proporción de grasa, el tipo de corte y los procesos de producción afectan su composición nutricional.
Muchas hamburguesas comerciales contienen mezclas de carne de distintas fuentes, lo que dificulta rastrear su origen y calidad.
Desde un punto de vista microbiológico, la carne molida es más susceptible a la contaminación que un corte entero. El proceso de molienda puede exponer más superficie al aire y a bacterias como Escherichia coli y Salmonella.
Tenga en cuenta que su alto contenido de grasas saturadas y sodio en versiones procesadas puede contribuir a enfermedades cardiovasculares si se consume en exceso.
Algunos estudios sugieren que compuestos formados en la cocción a altas temperaturas, como las aminas heterocíclicas, podrían estar asociados a riesgos cancerígenos.
¿Qué hacer para que no se encoja la carne de hamburguesa?
Lo que más se recomienda para evitar que la carne de hamburguesa se encoja al cocinarla, es elegir un buen tipo de corte y aplicar ciertas técnicas.
Es una buena opción usar carne con un 15-20% de grasa, como chuck, brisket o solomillo. Esta es una proporción equilibrada de grasa, que evita que se pierda humedad.
Otro truco es formar la hamburguesa ligeramente más grande que el pan, presionando un leve hundimiento en el centro con el pulgar. Esto compensa la contracción natural durante la cocción. No manipule en exceso la carne al formarla para que la carne no se compacte.
Finalmente, cocinar a fuego medio-alto en una parrilla o sartén permite un sellado rápido sin sobrecocción; también, evite presionar la hamburguesa con la espátula, para prevenir la pérdida de jugos y déjela reposar unos minutos tras la cocción.