El aumento del mínimo fue una decisión del Gobierno que traerá muchos riesgos: Presidente de la SAC

Este martes 24 de diciembre, el presidente de la república, Gustavo Petro, anunció mediante una rueda de prensa el incremento del salario mínimo para el año 2025, el cual se fijó en $1.423.500 pesos sin auxilio de transporte y $1.623.500 sumando el auxilio.

De esta manera, el porcentaje que se definió fue del 9.54%, siendo este número un intermedio entre los propuestos por los diversos gremios de empleadores y trabajadores, quienes manejaban una cifra del 5,2% y 12%, respectivamente.

Tras la decisión anunciada por el Gobierno Nacional, sectores se han pronunciado y cuestionado sobre si el incremento beneficia o no a los implicados, la mayor preocupación serán los altos costos que deben asumir las pymes, lo que podría perjudicar la economía del país.

Jorge Enrique Bedoya. Presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), afirmó en el noticiero ‘6AM’ de Caracol Radio que tanto las pequeñas y medianas empresas como quienes viven de la informalidad se verán perjudicados por el aumento del mínimo.

Así se vivió la mesa de negociaciones en donde no hubo acuerdo

Bedoya, presente en la mesa de negociación con los diferentes gremios, cuestionó el impacto en la economía que tendrá la decisión del Gobierno: “Lo primero, hay que tener presente que el mercado laboral colombiano es de 22.9 millones de ciudadanos, de los cuales 3.7 millones ganan el salario mínimo, este número de ciudadanos son los verdaderos beneficiados de la decisión tomada por el presidente; para ellos habrá más ingreso, pero lo segundo es qué va a pasar con los más de diez millones de colombianos que ganan menos del mínimo, qué sucederá con la tasa de informalidad, esto tiene un impacto muy grande en la economía del país”.

Además, con el aumento del salario mínimo, el presidente de la SAC mostró su preocupación ante un posible aumento en la tasa de informalidad: “La norma no dice que debe ser la inflación más la productividad, las decisiones sobre el mínimo tienen consecuencias que van más allá de la informalidad y el desempleo, en años anteriores las condiciones del país eran diferentes, pero la situación no es la misma de este año, es una inflación que va a la baja”.

Sobre cómo vivió la mesa de negociaciones junto al Gobierno, Bedoya aclaró si este escucha a los gremios: “Desde 2017 he estado en negociaciones, se han logrado acuerdos, con este Gobierno la primera vez llegamos a un acuerdo, en esta oportunidad no hubo acuerdo y partió de la base de que los sindicatos vieron esto como una negociación y no una concertación, no tiene sentido cuando tenemos una inflación del 5,2%, si no hay concertación el Gobierno toma una decisión, que puede ser acertada o no”.

Desde la SAC hay grandes agremiados, el incremento del mínimo tendrá un impacto en la inflación de los alimentos y las cifras del empleo formal, sobre esto, Bedoya expresó: “Es buena esta decisión para quienes ganan un salario mínimo, podrán salir de sus deudas y tener un mayor consumo, hay que pensar es en las pymes, para el empleador el costo de contratar es de 2′400.000 pesos aproximadamente, dependiendo las condiciones económicas del año 2025, esto puede ser una situación compleja para las empresas, no hay una sola respuesta, hay riesgos que hemos hecho saber, pero volveremos analizar en febrero, marzo o abril a ver qué impacto ha generado en la economía y en los colombianos que hacen parte de la informalidad”.