¡Cuidado! Estos son los riesgos de arrancar un carro en segunda

Las marchas o cambios hacen parte fundamental de la transmisión de los vehículos manuales, generalmente los carros disponen de diferentes marchas, numeradas con números del uno al cinco, más la reversa. Cada una de las marchas tiene una relación de engranajes diferentes que se utilizan para ajustar la velocidad y el rendimiento del vehículo en función de las condiciones al conducir.

La elección de la marcha dependerá de distintos factores como la velocidad que tenga el vehículo, el peso que tenga el vehículo y la pendiente en la que se esté conduciendo, pues el carro necesitará más potencia para moverse.

Las marchas más bajas, es decir, primera y segunda, proporcionan mayor potencia y aceleración, pero a velocidades mucho más bajas, por eso se utilizan para arrancar. Mientras que las marchas superiores, tercera, cuarta y quinta, reduce la potencia, pero permite alcanzar velocidades mucho mayores.

Riesgos de arrancar en segunda

Al igual que el carro se enfrenta a otros daños cuando se realizan algunas acciones como prenderlo empujado, arrancar el vehículo en segunda tiene efectos negativos evidentes.

Mayor desgaste del embrague

Tratar de poner el vehículo en marcha en segunda no solo dificultará el arranque, sino que también generará una carga mucho mayor en el embrague, el cual no debería pisar al tiempo que el freno.

Si esta práctica se convierte en algo recurrente, podrá generar desgaste en el embrague, el cual se manifiesta con signos como la dificultad de que entren los cambios, olor a quemado o que esté sea mucho más duro.

Mayor consumo de gasolina

Aunque o es muy común escucharlo, quienes afirman que es beneficioso para el vehículo arrancarlo en segundo porque disminuye el consumo de combustible, en realidad el gasto de combustible será mayor, pues obligará a pisar un poco más el acelerador para lograr la velocidad necesaria para que el motor y el embrague giren a la misma velocidad, lo que terminará aumento el gasto de gasolina.

Menor potencia en el arranque

La primera fue diseñada como la marcha ideal para arrancar el vehículo, al utilizar otros cambios para iniciar el movimiento el vehículo este tendrá mucha menor potencia, por lo que el movimiento será mucho más lento. Esta práctica se debe evitar en situaciones en las que sea necesario una rápida aceleración como en un cruce o el ingreso a una autopista, de lo contrario podría generarse un accidente.

Riesgo de calentamiento

El arrancar el vehículo en segunda hace que el motor trabaje en exceso, puede aumentar su temperatura y poner en riesgo, no solo el motor como tal, sino todo el sistema de refrigeración.

Así que arrancar en segunda siempre debe ser considerado como el último recurso y solo si es extremadamente necesario, de lo contrario podría generar daños, que aunque se pueden reparar, son muy costosos.

Forma correcta de arrancar un vehículo

Estos pasos servirán para arrancar un vehículo en un terreno plano, estos pasos cambiarán si necesita arrancar el carro en una pendiente.

1. Presione el freno para asegurar que el vehículo no se resbale ni se mueva.
2. Pise el embrague para que pueda meterse el cambio.
3. Encienda el motor.
4. Quite el freno de mano.
5. Ponga el carro en primera y mientras va soltando el clutch o embrague suavemente, vaya acelerando, no acelere el vehículo en neutro.