Las esmeraldas del occidente de Boyacá siguen estando en primer lugar a nivel mundial

Tunja

Así lo afirmó en entrevista para Caracol Radio, Alejandro Amelines, de Fura Gems, compañía que actualmente está a cargo de la mina Coscuez, en San Pablo de Borbur, al occidente de Boyacá, de donde salen algunas de las mejores esmeraldas, no solo de Colombia, sino del mundo.

Según el empresario, Colombia compite con Brasil, Pakistán y Afganistán, entre otros países, en el mercado mundial de esmeraldas; sin embargo, ninguno supera la calidad de las gemas colombianas.

“En este momento a nivel global, podemos encontrar esmeraldas no solo colombianas también esmeraldas de Brasil, de Zambia, Pakistán y Afganistán, estos países en cuanto a volumen pueden superar la producción de la esmeralda colombiana pero nunca van a superar la calidad de nuestras esmeraldas, ellos compiten más en un mercado global en volumen, pero la esmeralda colombiana siempre tendrá el primer lugar en reconocimiento, en valor, por lo que representa” dijo.

Explicó que hay un importante valor agregado para quienes adquieren una de estas piedras que son el producto de la apuesta por la transformación del territorio de donde son extraídas y que buscan, según Fura Gems, romper con ese pasado de violencia y dolor que por muchos años cobijó a esa región.

“Nosotros realmente lo que mostramos es nuestro producto insigne de Colombia que es la esmeralda colombiana, el valor agregado que nosotros le damos a nuestras esmeraldas es que, Fura Gems, desde que llega en el 2018, hemos querido cambiar totalmente la historia de este sector, un sector que lamentablemente en el pasado tuvo cierta historia que no queremos repetir (…) el elemento adicional que nosotros le agregamos a nuestras esmeraldas, es que es una compañía socialmente responsable, ambientalmente responsable, una compañía que emplea casi 500 personas directamente y beneficia a 6.000 personas de la comunidad cumpliendo toda la legislación colombiana en cuanto a temas mineros y ambientales. Nosotros lo que le decimos al cliente es que al comprar una esmeralda de nosotros, está comprando una esmeralda que no tiene ningún pasado oscuro, ningún pasado de violencia, que por el contrario, al comprar esa esmeralda, está promoviendo el desarrollo de las comunidades que están alrededor de nuestro proyecto minero”. Finalizó reiterando.

La compañía afirma que mantiene un plan muy ambicioso de responsabilidad social corporativa con más de 10.000 millones de pesos invertidos en su zona de operación, sólo en este concepto, desde su llegada al territorio hace cinco años; además, manifiestan que, por concepto de regalías, impuestos y obligaciones, la actividad extractiva le ha dejado aproximadamente 40.000 millones de pesos al país.