Protestas en Serbia tras disturbios en frontera con Kosovo
La jornada electoral en Kosovo ha resultado en choques de los habitantes serbios y albaneses del país.
La situación en el norte de Kosovo sigue tensa este martes y grupos de manifestantes serbios continúan congregándose frente a la municipalidad de Zvecan, donde el lunes se registraron enfrentamientos que dejaron 30 soldados de las fuerzas internacionales heridos.
En Zvecan, los efectivos de la fuerza internacional para Kosovo (KFOR), liderada por la OTAN, colocaron el martes una barricada en torno al ayuntamiento para bloquear el acceso, informó una periodista de AFP.
Tres vehículos blindados de la policía kosovar se estacionaron frente a la municipalidad. La presencia de esta fuerza genera indignación entre los serbios, que son mayoritarios en cuatro localidades del norte de Kosovo.
Los serbios, que representan un 6% de la población de Kosovo, boicotearon las elecciones municipales de abril en cuatro localidades del norte donde son mayoría.
En los comicios resultaron electos alcaldes albaneses, pero con una participación menor al 3,5%. Estos ediles, que los manifestantes consideran ilegítimos, asumieron sus cargos la semana pasada.
Las tensiones estallaron el lunes después de que los serbios intentaran entrar por la fuerza en la municipalidad de Zvecan, pero fueran repelidos por la policía de Kosovo con gases lacrimógenos.
En un comienzo, las fuerzas internacionales de la KFOR intentaron separar a los manifestantes de la policía, pero después procedieron a dispersar a la multitud utilizando sus escudos y sus porras.
Entonces, los manifestantes respondieron lanzando piedras, botellas y cócteles Molotov contra los soldados.
Más de 50 manifestantes resultaron heridos, tres de ellos de “gravedad”, según el presidente serbio, Aleksandar Vucic.
El jefe de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, hizo un llamado este martes a los líderes de Kosovo y de Serbia para que “reduzcan las tensiones de forma inmediata”, y sin condiciones.
Borrell pidió a las autoridades de Kosovo que suspendan las operaciones policiales en torno a los edificios municipales y llamó a los serbios a que dejen de manifestarse.
Francia condenó la violencia y llamó a “todas las partes, en particular al gobierno de Kosovo, que tomen medidas inmediatas para reducir las tensiones”.
Por su parte, Rusia pidió a Occidente a que ponga fin a la “propaganda engañosa sobre Kosovo”.
“Hacemos un llamado a Occidente a que ponga fin a su propaganda engañosa y que deje de atribuir la responsabilidad de los incidentes de Kosovo a los serbios abocados a la desesperación”, dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia.