Meloni: Italia no será convertida en el campo de refugiados de Europa
La primera ministra de Italia dijo que sigue siendo clave la ayuda europea para atender la crisis migratoria que tiene en sus costas.
Italia no está dispuesta “a convertirse en el campo de refugiados de Europa”, afirmó hoy la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, que aseguró que su Gobierno ha salvado a más migrantes en dificultades en el Mediterráneo Central que todos los anteriores.
Meloni intervino en la Cámara de los diputados con motivo del próximo Consejo europeo en el que Italia quiere debatir la política migratoria y respondió a los ataques de la oposición sobre el naufragio del pasado 26 de febrero frente a las costas de Calabria (sur), en el que murieron al menos 88 migrantes.
“Nuestros centros de acogida están llenos y es muy difícil evitar que los migrantes salgan y vayan a otros países. Además, no estamos dispuestos a aceptar que Italia sea el campo de refugiados de Europa”, sentenció la líder ultraderechista.
Respecto a las acusaciones de que la Guardia Costera italiana no acudió al rescate de la barcaza que naufragó en la playa de Steccato di Cutro, Meloni aseveró en un tono duro: “Decirle al mundo que, frente a este enorme esfuerzo (de rescates), dejamos morir a los niños en el Mediterráneo es una calumnia no solo al Gobierno sino al Estado italiano”.
Explicó que los datos de los rescates realizados en estos meses de Gobierno, de cerca de 33.000 migrantes, prueban que se logró “salvar a más personas en comparación con las llegadas”. “Los datos desacreditan cierta propaganda”, agregó
“Nos han dejado solos para hacer este trabajo”, agregó Meloni en una crítica a la Unión Europea (UE), después de que este martes en el Senado ya advirtiese de que la migración “es una emergencia que se está volviendo estructural” y que “las fronteras marítimas son europeas y la UE tiene que defenderlas”.
Sobre el envío de armas a Ucrania, criticado por el opositor Movimiento 5 Estrellas (M5S), Meloni también fue contundente hoy, al asegurar que se estaba haciendo propaganda “sobre la piel de un país” y que para detener la guerra “hay que decírselo a (presidente ruso, Vladimir) Putin”.
“No se puede permitir la invasión de Ucrania. Si paramos (de apoyar a Ucrania), la permitiremos”, enfatizó.