Listo el protocolo del cese al fuego entre el Gobierno y disidencias FARC
Ese grupo ilegal no podrá transitar por cabeceras municipales, inspecciones de policía y vías primarias.
Imagen de referencia. Foto: Colprensa
Bogotá D.C.
El Ministerio de Defensa y la Oficina del Alto Comisionado para la Paz anunciaron este miércoles 8 de febrero que está listo el protocolo sobre el cese al fuego bilateral temporal pactado entre el Gobierno Nacional y el Estado Mayor Central de las extintas FARC, grupo armado que no firmó el acuerdo de paz en 2016.
Luego de más de un mes de que el presidente Gustavo Petro anunciara en su cuenta de Twitter que se había acordado un cese al fuego bilateral con grupos armados, ya se conocen las reglas de ese pacto con una de estas organizaciones y de cómo será el monitoreo y verificación.
En un comunicado, el Gobierno Nacional indicaron que el protocolo establece un mecanismo de Veeduría, Monitoreo y Verificación que emitirá conceptos técnicos y elaborará recomendaciones para prevenir y atender posibles incidentes o incumplimientos.
Asimismo, incluirá delegados del Ministerio de Defensa y la Oficina del Alto Comisionado para la Paz y un componente internacional, posiblemente Naciones Unidas y países garantes. También se contará con el acompañamiento de miembros acreditados de la sociedad civil, la Iglesia Católica y otras expresiones de iglesias.
Dentro de los lineamientos establecidos, se prohíbe el tránsito o permanencia de integrantes del Estado Mayor Central FARC-EP en cabeceras municipales, corregimientos, inspecciones de policía, así como en vías primarias, evitando cualquier afectación a la vida e integridad física de la población civil.
Se enfatizó que, como en los demás ceses, no se suspende el ejercicio pleno del Estado Social de Derecho, por lo que la Fuerza Pública seguirá ejerciendo sus obligaciones de seguridad y defensa nacional y no se suspenden las actividades plenas de todos los poderes del Estado, como la Fiscalía General.
“Este protocolo firmado entre el Gobierno Nacional a través del Alto Comisionado para la Paz y el Estado Mayor Central de las FARC-EP, a través de su jefe de delegación, busca ser un instrumento para el desescalamiento de la confrontación armada y una herramienta de facilitación para el proceso de negociación entre las partes”, señala el comunicado.