Verstappen ganó la pole y le apunta al título de la Fórmula 1 en Suzuka
El neerlandés será bicampeón del mundo si gana la carrera con la vuelta más rápida o si gana y Leclerc no termina segundo.
El neerlandés Max Verstappen (Red Bull), líder destacado del Mundial de Fórmula Uno, apunta este domingo a revalidar su título desde el primer puesto de la parrilla del Gran Premio de Japón, el decimoctavo del campeonato, en el circuito de Suzuka.
Verstappen, de 25 años, logró la decimoctava ‘pole’ desde que corre en la F1 -la quinta de la temporada- al cubrir, en su mejor intento, con el neumático blando, los 5.807 metros de la pista japonesa en un minuto, 29 segundos y 304 milésimas, sólo diez menos que el monegasco Charles Leclerc y con apenas 57 sobre el otro Ferrari, el del español Carlos Sainz. En una jornada en la que se rodó en seco y que se resolvió de forma apretada, pero en la que el nuevo ídolo deportivo de los Países Bajos efectuó toda una declaración de intenciones al encabezar todas las tablas de tiempos menos la de la Q2.
El neerlandés, que desaprovechó el pasado domingo, al acabar séptimo en Singapur -donde ganó su compañero mexicano-, su primera oportunidad para dejar matemáticamente sentenciado el Mundial, intentará resolverlo ‘a la segunda’ en Suzuka, mítico circuito del que es propietario Honda, el motorista de la escudería austriaca. Donde será campeón, a falta de cuatro carreras, siempre y cuando sume ocho puntos más que Leclerc y seis más que ‘Checo’, tercero en el Mundial -a sólo dos puntos del anterior- y que afrontará la carrera desde la segunda fila, al lado del español de Ferrari.
¿Cómo será campeón?
Hay diversas combinaciones, pero las más fáciles de memorizar, por sencillas -y nada descartables- son que Verstappen gane la carrera, con vuelta rápida; o que venza sin el giro rápido, siempre y cuando Leclerc no acabe segundo en la legendaria pista nipona.
Debutante en el Mundial en 1976, cuando decidió el campeonato de ese año en favor del inglés James Hunt y en detrimento del triple campeón mundial austriaco Niki Lauda -brutalmente accidentado (y a punto de morir abrasado) sólo unas semanas antes, en el Nürburgring alemán-, en una carrera histórica marcada por las lluvias monzónicas.
No llovió este sábado en el circuito de la prefectura de Mie, a diferencia del viernes, cuando el inglés George Russell (Mercedes)´-que sale octavo, desde la cuarta fila, al lado de Fernando Alonso- marcó el mejor tiempo de los entrenamientos. Y, en lugar de hacerlo con neumáticos de lluvia extrema o intermedios, se rodó con ‘slicks’. En una jornada en la que se marcaron los mejores cronos del día con el neumático blando.
Le puede interesar
Verstappen ya lo hizo en el tercer y último libre, unas horas antes de la calificación. El súper-depredador neerlandés, ganador de once de las 17 carreras disputadas este año, firmó un tiempo de 1:30.671 con el que mejoró en 294 milésimas a Sainz, segundo en un ensayo que Alonso acabó cuarto, a seis décimas; y ‘Checo’, quinto, a ocho.
El francés Pierre Gasly (Alpha Tauri) respondió al anuncio de que el año próximo ocupará la plaza que deja el genial piloto asturiano en Alpine cayendo a las primeras de cambio, en la primera ronda de la calificación, en la que ‘Mad Max’ mejoró en una décima a Sainz: segundo en la Q1, en la que Fernando marcó el cuarto tiempo -a 37 centésimas- y el bravo piloto tapatío, el quinto -a cuatro décimas-.
Junto a Gasly -a quien a su vez reemplazará en Alpha Tauri el neerlandés Nyck De Vries- también quedó eliminado, tras el primer acto, el danés Kevin Magnussen, quinto tiempo en los entrenamientos del viernes con su Haas.
En una Fórmula Uno en la que cada vez se habla más en español, ‘Checo’ -el primero en bajar del minuto y medio- fue el más rápido en la Q2, en la que fue cuatro décimas más veloz que Alonso.
El doble campeón mundial asturiano -que a partir del año próximo será piloto de Aston Martin- acabó segundo, con cuatro milésimas de ventaja sobre Verstappen, en la segunda ronda de la cronometrada principal. En la que quedaron eliminados el finlandés Valtteri Bottas (Alfa Romeo), doble subcampeón del mundo cuando era piloto de Mercedes; y el australiano Daniel Ricciardo, ocho veces victorioso en la F1, que no seguirá en McLaren después de esta temporada y que posiblemente tampoco lo haga en la categoría reina.
En la Q3 llegó la hora de la verdad. Y a la hora de la verdad, aunque los Ferrari estuvieron ahí mismo, a Verstappen -investigado a causa de una acción por la que el inglés Lando Norris (McLaren), décimo en parrilla, le acusó de haberlo molestado, antes de la ‘chicane’-, le sobró la última vuelta, en la que perdió una pieza de la parte trasera de su monoplaza y acabó levantando el pie.
En su penúltimo intento, ‘Mad Max’ -que tras la citada investigación no fue sancionado, pero recibió una reprimenda- mejoró en dos décimas y media a Leclerc y en 33 centésimas a Sainz. Esa vuelta le bastó, porque el monegasco se acercó a una sola centésima y Carlos, “cansado de” quedarse “a media décima de la ‘pole’” se tuvo que conformar con el tercer puesto en parrilla.
Verstappen ya roza su segundo título seguido. En un Mundial al que, después de la carrera de este domingo, le quedan otras cuatro: las de Estados Unidos, México, Brasil y Abu Dabi. Y al que, en Suzuka, le queda por despejar una última incógnita. La derivada de la meteorología, que apunta a que es bastante probable que llueva este domingo, aunque sin precisar exactamente a qué hora.
A ‘Mad Max’ le da exactamente igual que llueva o que no lo haga. “Lo importante es tener un coche competitivo”, apuntó la joven estrella neerlandesa tras la calificación. Y Red Bull, que -salvo auténtica hecatombe- también ganará el Mundial de constructores, lo tiene.