Gustavo Petro le pide a la Corte Penal Internacional que envíe una misión a Colombia

El senador colombiano del Polo Democrático Alternativo, Gustavo Petro, pidió en Madrid, a la Corte Penal Internacional una misión de observación, para garantizar que el Plan Colombia y la ley de Justicia que ha propuesto el presidente Uribe sea una ley de verdad, justicia y reparación real.
"La CPI debería no intervenir porque hay que dar un margen de actuación al país, pero sí tener una misión de observación sobre el terreno, viendo si la confesión de los paramilitares va hacia la verdad o hacia la impunidad y por tanto tomando unas medidas objetivas que se necesitarían en el inmediato futuro".

En este sentido señaló que "quien pesa sobre el CPI no es Estados Unidos, es Europa", por lo que Europa, dijo, "tiene que saber descifrar si la prioridad está en los intereses económicos de las empresas europeas, principalmente españolas, que están en Colombia o de los derechos humanos".
El objetivo de su grupo político, dijo, "es la verdad, conocer los nombres de los funcionarios públicos que han permitido por acción o por omisión las matanzas en Colombia". Según el senador, "Colombia es donde más crímenes contra la humanidad, en número, en intensidad y en víctimas se han cometido en todo el hemisferio" y denunció que el Gobierno estudia caso por caso las muertes, "en vez de en su conjunto, lo cual sería juzgar crímenes de lesa humanidad".

"Muchas se han sabido porque una parte de la justicia está actuando, la Corte suprema, sectores de la Fiscalía han garantizado el funcionamiento de este instrumento" pero, señaló, "el aparato judicial tiene que fortalecerse".

"Uribe digamos que forma parte de un segmento de la sociedad colombiana que piensa que se gana con fórmulas que no son comunes a la democracia con tal de destruir a las FARC", dijo el senador.

En referencia al paramilitarismo, explicó que en Colombia "se construyeron unas autodefensas para destruir el comunismo colombiano pero que, vinculados al narcotráfico, lo hicieron de tal manera que devoraron la pequeña y débil democracia colombiana, y ahora destruyen con mayor perversidad".

En su opinión, Colombia vive en una sociedad polarizada en la que las diferencias políticas, "muchísimas veces en las últimas décadas, han sido dirimidas mediante la eliminación del contrincante".