275.082 nuevos textos escolares en braille y macrotipo para colegios
La imprenta nacional les ha entregado a las instituciones educativas del país 275.082 libros y textos escolares en formatos accesibles.
Como parte de la gestión de empalme con el nuevo Gobierno, que se posesiona en el mes de agosto, el Instituto Nacional para Ciegos –INCI presentó un informe de sus últimos cuatro años de trabajo en beneficio de la población con discapacidad visual del país.
Entre los proyectos que ha llevado a cabo en el periodo 2015 – 2018, se destacan los de la Imprenta Nacional para Ciegos, la Biblioteca Virtual, el servicio de Audio descripción y el desarrollo y apropiación de TIC y contenidos digitales accesibles.
Dentro de los aportes más significativos de la Imprenta Nacional para Ciegos está la elaboración de las tarjetas electorales en tinta braille para las elecciones de Congreso y Presidencia. Para estas últimas, en la imprenta del INCI se hicieron 90 mil tarjetas en tinta-braille para que las personas con discapacidad visual del país pudieran acudir a las urnas y ejercer su derecho al voto.
Gracias a la labor de la imprenta, entidades públicas y privadas e instituciones educativas pudieron recibir dotaciones de material para personas con discapacidad visual a nivel nacional, lo que significa una apuesta para el mejoramiento de la calidad, la cobertura y la sostenibilidad de los proyectos que las cobijan.
Durante este cuatrienio, el INCI entregó a las instituciones educativas del país un total de 275.082 libros y textos escolares en formatos accesibles de braille, relieve, macrotipo y digitales, así como otras ayudas técnicas para la población con discapacidad visual.
Dentro de las recomendaciones que el INCI le entregó al nuevo Gobierno en materia de producción y distribución de material especializado está una mayor adaptación de formatos accesibles a la información pública, ya que en la actualidad la oferta de este tipo de formatos para las personas con discapacidad visual es muy baja.
Las entidades, a la hora de divulgar información pública, no contemplan que las personas con discapacidad visual tienen también el derecho de acceder a la información y omiten la adaptación de sus materiales. El reto del nuevo Gobierno es, entonces, incentivar la cultura de la inclusión desde las mismas entidades para que así el acceso a la información sea para todos.